La reina Beatriz de Holanda carga contra un líder islamófobo
Geert Wilders enfureció a la soberana por criticar que se pusiera un velo durante su visita a una mezquita en Abu Dabi
BRUSELAS.Actualizado:La reina Beatriz de Holanda plantó ayer cara al líder populista Geert Wilders con una contundencia desconocida. Durante un viaje oficial a Omán, la soberana tachó de «auténtico despropósito» las críticas vertidas por el político antimusulmán por ponerse el velo en una mezquita. Beatriz I, que encabeza la Casa Real de Países Bajos desde 1980, no solo desafió a Wilders con sus inusuales declaraciones. Entre acusaciones de «legitimar la opresión de las mujeres», la reina se cubrió la cabeza con la prenda en una segunda visita a otro templo y además utilizó la abaya, la túnica femenina que tapa el cuerpo hasta los pies.
La soberana, de 73 años, inició la semana pasada un viaje de Estado al golfo Pérsico al frente de una nutrida delegación holandesa, incluidos el príncipe heredero Guillermo y su esposa Máxima. La polémica estalló el domingo durante su visita a Abu Dabi. Allí, la reina acudió a la mezquita del jeque Zayed bin Sultán al-Nahyan, fundador de Emiratos Árabes. Al igual que la princesa Máxima, cubrió su cabeza y su sombrero con un llamativo velo azul para recorrer el templo.
El atuendo de su reina no tardó en enfurecer a Wilders. El líder del Partido de la Libertad, que ofrece respaldo parlamentario al Gobierno en minoría del liberal Mark Rutte, acusó a Beatriz I de tocarse con «el símbolo más visible del sometimiento de la mujer». Sus acusaciones causaron un torbellino político. El primer ministro Rutte le contestó en el Parlamento que cuando «su majestad visita un lugar de culto respeta los requerimientos en la vestimenta». Pese a las explicaciones, la princesa Máxima salió en defensa de la monarca y remarcó la pujanza de la mujer en Abu Dabi, donde las estudiantes universitarias ganan por goleada y las emprendedoras ya son mayoría.