Banesto opta por la prudencia y aparta 400 millones para provisionar su ladrillo
Actualizado:Banesto abre la ronda de resultados bancarios con lo que, a buen seguro, será la tónica general en el sector. El banco presidido por Antonio Basagoiti ha optado por la prudencia extrema al provisionar (apartar de las ganancias) 400 millones de euros para cubrir eventuales problemas con su cartera de activos inmobiliarios. Resultado de esa operación: el beneficio neto de la filial del Santander cayó en 2011 un 73% hasta los 125 millones.
Tanto Basagoiti como el consejero delegado, Javier García Cantera, destacaron que la provisión era voluntaria y extraordinaria, y que no obedecía a ninguna indicación ni del Gobierno ni del Banco de España. Pero el propio ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ya ha lanzado la idea de que el sector debe apartar unos 50.000 millones en los próximos años para enterrar para siempre el problema del inmobiliario. Las cifras y los planes definitivos se conocerán pronto, pues el Ejecutivo prepara un nuevo plan para acelerar la reordenación del negocio y adecuar el valor del ladrillo que permanece en los balances de las entidades a su precio actual de mercado, que estará listo a mediados de febrero. Tras Banesto, todo el negocio hará lo propio, aun a costa de mermar los beneficios anuales. Los dos directivos aplaudieron la idea de sanear cuanto antes el sistema, y subrayaron que la solución no podrá ser nunca universal, pues habrá que distinguir a unas entidades de otras: «todavía hay mucha niebla en este asunto».