La Junta pide la ayuda del resto de administraciones para salvar Visteon

El consejero de Gobernación, Francisco Menacho, ha sido la persona encargada de dar la cara ante la plantilla de Visteon. Lo hizo ayer acompañado del delegado del Gobierno en Cádiz en funciones, Daniel Vázquez, y de la delegada provincial de Innovación, Angelines Ortiz. La situación de la planta gaditana se complica por días al no llegar un inversor que se haga cargo de ella. La multinacional no está dispuesta a dar marcha atrás a su decisión de cerrarla, anunciada el pasado junio, y sigue adelante con sus planes para la liquidación y despedir a sus 395 trabajadores.

La Junta ha accedido a la solicitud de la plantilla de mantener un encuentro para buscar una solución al conflicto, después de que la delegada de Innovación, Angelines Ortiz, se comprometiera a finales del pasado diciembre a trasladar la grave situación de los trabajadores al Gobierno regional. La plantilla insiste en que la Junta debe hacerse con los activos de la empresa para facilitar la entrada de un socio inversor y mantener así la actividad. El consejero Menacho aclaró ayer que la Junta «lleva trabajando meses en el conflicto de Visteon» y pidió la implicación en este asunto del resto de administraciones para ver si hay o no una solución. Así, enviará en las próximas horas una carta para la constitución de una mesa de trabajo en la que estarán representantes de la Junta, el Ministerio de Industria, la Diputación Provincial y al alcalde de El Puerto. Menacho considera que la salvación de Visteon es competencia de todas las administraciones públicas «y no solo de la Junta». En este punto han mostrado su disconformidad los propios trabajadores, que consideran que la Junta «es la que tiene toda la responsabilidad a la hora de acabar con el conflicto». El portavoz de CC OO en el comité, Jesús Serrano, señala que la primera medida que debe tomar la Administración regional «es hacerse con los activos de la factoría, porque de lo contrario Visteon marcará siempre la pauta».

Menacho insistió ayer ante la plantilla en que son las cuatro administraciones las que deben remar de forma conjunta. El tiempo juega en contra, ya que la empresa está a punto de entrar en concurso de acreedores. Menacho señaló que la Junta seguirá trabajando por solucionar esta situación, incluso si el Juzgado de lo Mercantil acepta la quiebra de la planta gaditana.

Menacho aseguró al término de la reunión con los trabajadores que «este conflicto no se puede convertir en un enfrentamiento político», más aún cuando las elecciones autonómicas están cerca y por eso, a principios de la semana que viene, cuando cuadren las agendas, se sentarán a dialogar. Visteon anunció el pasado junio el cierre de su filial en El Puerto, Cádiz Electrónica, alegando falta de competitividad y escaso negocio. Reservó entonces quince millones de euros para costear el cese de actividad y elevó un expediente de regulación de empleo (ERE) contra la plantilla en octubre, que fue rechazado en noviembre por la Delegación de Empleo.