Moreno admite un «inmenso daño» a Griñán, pero recuerda que este era diputado en 2004
SEVILLAActualizado:El Gobierno andaluz intenta que este nuevo episodio del escándalo de los ERE no salpique a Griñán en plena precampaña electoral como sí pretende el PP, quien le pide explicaciones en el Parlamento. El Ejecutivo recuerda que Griñán era diputado en el Congreso en febrero de 2004, cuando se firmaron las subvenciones al chófer de Guerrero. «No hay quien le gane al Gobierno de Griñán en honestidad y transparencia», dijo ayer la consejera de Presidencia Mar Moreno, quien una vez más insistió en la diligencia de la Junta a la hora de denunciar el caso y en que el fraude de los ERE se circunscribe al exdirector general de Trabajo, Francisco Javier Guerrero.
Moreno no pudo precisar por qué no saltaron las alarmas y se le mantuvo en el cargo 9 años si ahora se descubre que podía sufrir una adicción a las drogas. La Junta mantiene que quien delinque se guarda de que no le pillen, razón por la que defiende que los exconsejeros de Empleo no se percataron de las tropelías de Guerrero.
Moreno, no obstante, admitió que el nuevo episodio de Guerrero está causando un «inmenso daño» a Griñán y a todo el Gobierno y pidió que la Justicia actúe con contundencia lo más pronto posible. «Nos repele este asunto y, a diferencia de otros Gobiernos, no tapamos, no justificamos ni defendemos a nadie que pueda ser culpable», en referencia a los expresidentes autonómicos del PP procesados.
A la pregunta sobre si Guerrero puede tirar de la manta, la consejera de Presidencia respondió: «Si hay mantas, que se tiren de las mantas hasta el último cabo». Moreno recordó que en 30 años no ha habido ningún cargo socialista en el banquillo en Andalucía, lo que, según ella, «el PP no puede decir lo mismo», en referencia a Camps y Jaume Matas.