Diputación crea un plan de emergencia para dar trabajo a 782 parados de la provincia

La Diputación de Cádiz ha estrenado el año con un plan de emergencia en favor del empleo. Se trata de una medida de carácter urgente para sacar del atolladero del paro a unos 782 desempleados de larga duración, que ya no perciben subsidio alguno. Esta actuación está dirigida a los municipios de menos de 20.000 habitantes, así como a entidades locales situadas en las zonas rurales de la provincia.

El presidente del Gobierno provincial, José Loaiza, ha comparecido esta mañana junto al vicepresidente segundo de la institución, Bernardo Villar, al diputado de Empleo, Ignacio Romaní, el titular de Hacienda, Juan Antonio Liaño, y el diputado de Bienestar Social, Alfonso Candón, para explicar las claves y objetivos de este plan especial de empleo. Loaiza ha realizado un minucioso análisis de la situación sociolaboral de la provincia, en la que ha puesto de manifiesto como la tasa de paro se ha multiplicado por dos en solo tres años desde que comenzó la crisis, pasando del 18,9% de 2008 al 32,1% de 2011. Ante esta situación, la Diputación de Cádiz ha puesto en marcha un plan de emergencia que se enmarca dentro del plan provincial de empleo 2012-2015. Esta actuación tiene como objetivo colocar a 782 parados durante los próximos 45 días con contratos temporales de quince días de duración.

Para ello, los ayuntamientos deben presentar lo antes posible ante los servicios de Diputación proyectos de obras y servicios para llevar a cabo en sus municipios. Loaiza ha aclarado que los parados que opten a un empleo de este plan deben cumplir con un sistema de baremación y serán los servicios sociales de la propia Diputación provincial, junto con los consistorios, los encargados de evaluar al aspirante. Se primará a los desempleados con más antigüedad, padres de familia y sin prestación. En este sentido, el presidente de la Diputación ha destacado que “ya se han acabado las contrataciones a dedo”, en clara referencia a los programas Proteja y Plan E que desarrolló el anterior gobierno socialista y que, según el PP, no han servido para rebajar el desempleo en la provincia. EL plan social de emergencia cuenta en su primera fase con un presupuesto de 4 millones de euros, de los que el 20% irá a la compra de materiales y el resto a pagar salarios. El plan se destinará a obras en la vía pública, rehabilitación, obras para la movilidad urbana, equipamientos y actuaciones en polígonos industriales.