Chacón en alza
Se coloca a la altura de Rubalcaba recordando que hace siete meses se sacrificó por el PSOE
Actualizado:La anunciada presentación de Carme Chacón como aspirante a la secretaría general del PSOE, mientras Alfredo Pérez Rubalcaba exponía las bases de su candidatura, vino a preludiar ayer la igualada disputa que, a la espera de terceros o cuartos aspirantes, protagonizarán ambos en el 38 congreso socialista. Resulta imposible hallar diferencias sustanciales entre los postulados de una y otro, por lo que los delegados al cónclave de Sevilla acabarán eligiendo a su nuevo líder en función del crédito que cada cual merezca a la militancia del PSOE. Hasta el punto de que, probablemente, los compromisarios socialistas se vean obligados a optar entre la experiencia política y la juventud. En este sentido las aspiraciones de Chacón no dependen tanto de la multiplicidad de acentos que quiso reivindicar para sí con su presentación en la localidad almeriense de Olula del Río, donde nació su padre, arropada por socialistas catalanes y de otras comunidades. Su ventaja estriba en que se postula no para ejercer la secretaría general de manera transitoria sino para convertirse en la candidata socialista a la presidencia del gobierno en las elecciones generales del 2015. Las bases socialistas están asistiendo a la liza que mantienen Chacón y Rubalcaba más bien a la expectativa. La crisis de liderazgo resulta por otra parte tan general entre los socialistas que es improbable que los dirigentes autonómicos o locales arrastren tras sus preferencias e intereses a los delegados de sus respectivas organizaciones territoriales. Rubalcaba ha querido tomar ventaja postulándose el primero e intentando, así, desplazar a segundo plano a Chacón. Pero la exministra de Defensa ha sabido colocarse en una posición igualada en cuanto a posibilidades de triunfo a la de Rubalcaba. Ayer recurrió a un argumento moral que puede resultarle eficaz al recordar que, por el bien del PSOE, hace siete meses dio un paso atrás y al señalar que, por el bien del PSOE, esta vez da un paso adelante. Claro que la testarudez, el inconformismo y la firmeza que reclamó para sí Carme Chacón ni aseguran ese partido «fuerte, activo e inteligente» que promete ni garantizan que el socialismo se constituya pronto en una alternativa creíble frente al dominio popular.