La Fundación Alberti niega haber cometido irregularidades sobre el legado del poeta
La entidad admite mediante un comunicado que la falta de subvenciones les ha obligado a recortar sus actividades
Actualizado: GuardarLa Fundación Rafael Alberti, constituída en 1994 para velar por el legado del poeta portuense, ha negado mediante un comunicado cualquier irregularidad cometida en su objetivo de preservar la herencia del escritor. La entidad, antes dirigida por María Asunción Mateo, ha salido así al paso de la versión dada por el escritor Benjamín Prado en el reportaje '¿Quién esconde el tesoro de Alberti?', publicado por el diario El País el pasado sábado 17 de diciembre. En dicha nota, los representantes de la entidad aseguran que las afirmaciones en él vertidas son «totalmente inciertas y otras que, por inexactas, contribuyen a crear confusión en la opinión pública».
Los actuales responsables aseguran que entre los fondos figuran las obras y elementos que se han considerado «desaparecidos». «Una amplia selección de la obra de Alberti ha estado y sigue estando expuesta a los visitantes de forma permanente», afirman. «El resto, como en cualquier centro museístico, está custodiado con las medidas de conservación y seguridad adecuadas». Al respecto de otras «joyas» de otros autores como Picasso, Miró, Tàpies, Saura, Caballero, Genovés, Quatrucci, Guinovart, y un largo etcétera, los patronos sostienen que se han expuesto de forma temporal, «siguiendo recomendaciones de especialistas en conservación de obras de arte. Por otra parte la biblioteca contiene más de 7.000 ejemplares y el archivo numerosos fondos documentales (cartas, prensa, revistas...) y audiovisuales (fotografías, discos, grabaciones...)».
Como añaden en el comunicado desde la Fundación, todos estos fondos pueden ser consultados por investigadores y estudiosos. «Una vez catalogados y digitalizados, están siendo introducidos en la base de datos de la aplicación informática Domus, diseñada por el Ministerio de Cultura para la gestión de Museos y actualmente en proceso de implantación. Por otra parte una selección de las obras sobre papel fue restaurada en 2002 por Instituto del Patrimonio Histórico Español. Así mismo, muchas de estas obras has sido en ocasiones especiales cedidas en préstamo temporal a otros centros museísticos»
La salida de la presidenta
En cuanto a la organización interna de la entidad, la entidad que vela por el legado del poeta mantiene que no se ha disuelto. Así, afirman: «Su Patronato aceptó la decisión por motivos personales de María Asunción Mateo de renunciar al cargo de Presidenta, tras estar al frente de la entidad durante diecisiete años de forma no remunerada. Por ello acordó iniciar el proceso de extinción de la fundación para transformarla en una nueva entidad, realizando informes previos que garantizaran su viabilidad y legalidad. También se acordó emprender las gestiones oportunas para constituir un nuevo Patronato, como nueva forma de gestión que diera continuidad a la conservación, exposición, estudio y difusión de la obra de Rafael Alberti». En este punto, admiten que la actual situación económica ha retrasado la transición de su cambio institucional y que, actualmente, están trabajando en ello.
Además, la Fundación Alberti reconoce por primera vez que tras la desvinculación de la viuda del escritor de la entidad, en los dos últimos años ha disminuido el número actividades organizadas por la Fundación o su repercusión mediática. Según aseguran, este recorte se debe a la drástica reducción de las subvenciones procedentes de los organismos patrocinadores. «Este hecho, debido a la crisis económica general, es común a casi todas las entidades culturales de características similares», concluyen.