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Merkel y Zapatero, en una comparecencia en Madrid. :: J. MEDINA/ REUTERS
Economia

La crisis dispara la cifra de españoles que emigran a Alemania

Entre enero y junio aumentó a un ritmo del 49% interanual, tras el llamamiento a los jóvenes profesionales

R. C.
MADRID.Actualizado:

Todavía son pocos, pero la cifra crece a fuerte ritmo. Entre enero y junio de este año, 2.400 españoles emigraron a Alemania, un 49% más que en el mismo periodo de 2010. Según cifras aportadas por la Oficina Federal de Estadísticas (Destatis), este incremento solo se vio superado por el aumento de inmigrantes griegos. Los trabajadores procedentes del país heleno fueron 4.100, un 84% más. Destatis atribuye la progresión a la crisis que atraviesa la zona euro, a la desaceleración del crecimiento en la mayoría de los países y al desánimo que invade a la población de aquellos que muestran una tasa de desempleo más elevada, como es el caso de España, con un 22% de parados sobre el total de la población activa.

Alemania ha empezado a registrar un fuerte flujo migratorio procedente de los Estados más vulnerables. Unas 435.000 personas originarias de un país extranjero se instalaron en el país en el primer semestre de este año, una cifra que supone un incremento del 19% respecto al mismo periodo de 2010. Al mismo tiempo, la cantidad de personas que dejaron Alemania se redujo ligeramente, hasta quedar por debajo de las 300.000. En consecuencia, el saldo migratorio (diferencia entre llegadas y salidas) pasó de 61.000 a 135.000 personas, con un fuerte aumento interanual del 122%.

La inmigración procedente de la Unión Europea (UE) registró un avance del 29%. «Lo sorprendente es el fuerte aumento de la inmigración proveniente de los países más afectados por la crisis financiera», destacó Destatis. Hasta ahora la economía alemana ha resistido mejor a la crisis de la deuda en la zona euro que los otros países europeos y registra una tasa de desempleo del 6,5%, mucho menor que la de sus vecinos.

A pesar de la desaceleración económica que ha afectado a su actividad durante los últimos meses, Alemania busca atraer inmigrantes para compensar el declive de su natalidad y luchar contra la penuria de mano de obra que ya afecta a algunos sectores de su economía. Si en las décadas de los 50 y los 60, miles de españoles decidieron hacer las maletas y poner rumbo a Centroeuropa para conseguir el puesto de trabajo que aquí les faltaba, medio siglo después ese mismo camino se abre para los jóvenes españoles cualificados y en situación de desempleo en coincidencia con la necesidad germana de resolver su carencia de determinado tipo de profesionales.

La canciller alemana, Angela Merkel, planteó esta posibilidad al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la cumbre bilateral celebrada el 3 de febrero en Madrid. Fue a iniciativa de la Unión Democristiana (CDU), el partido de la canciller, que respondía así a las quejas de los líderes sindicales germanos sobre la escasez de personal cualificado en las empresas. La oferta acudía además en auxilio de España en momentos en los que su tasa de paro juvenil, en torno al 45%, es considerada «insostenible» y «escandalosa» por parte de las autoridades comunutarias.

«Desempleados»

«En el sur y el este de Europa hay muchos jóvenes desempleados que buscan un empleo», explicó el viceportavoz de la CDU en el Reichstag, Michael Fuchs, a la revista 'Der Spiegel'. Por esa razón, la propuesta se extendió a otros estados azotados por la crisis del desempleo y de la deuda. España y Portugal se han considerado los países más adecuados, porque a su elevada proporción de parados añaden unos trámites burocráticos de emigración mucho más simples y existe la libre circulación de personas. Para el máximo responsable de la CDU en Baviera, Max Straubinger, es mejor conseguir fuerza laboral que provenga de la Comunidad, «que tener que cambiar las leyes de inmigración».

Posteriormente, el Gobierno alemán concretó la necesidad en unos 800.000 trabajadores cualificados, especialmente en el terreno de la ingeniería y las telecomunicaciones. El ministro germano de Economía y Tecnología, Reiner Brüderle, reconoció que España se proponía captar «a las mejores cabezas» de otros países. Y el pasado verano, la Cámara de Comercio Alemana organizó dos seminarios, uno en Barcelona y otro en Madrid, para promover la movilidad laboral «como opción y oportunidad para profesionales españoles», animando, en particular, a los ingenieros, por el elevado número de estos técnicos, en torno a 100.000, que se van a jubilar durante la próxima década. Pero la oferta puede ser más abundante: según la red europea de empleo Eures, durante 2012 y años sucesivos el mercado alemán necesitará también médicos, enfermeras, cuidadores de gente mayor, electricistas y también profesores de español.