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La plantilla de Limasa desconvoca la huelga ante la promesa de pago

La empresa asegura que abonará el salario de noviembre a lo largo de esta semana por lo que las empleadas siguen en sus puestos

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En esta ocasión, el anuncio de huelga en el servicio de limpieza de colegios públicos y dependencias municipales solo se ha quedado en amenaza. La reunión que mantuvieron las trabajadoras de Limasa con los representantes de la empresa en el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) acabó en la mañana de ayer con la promesa de que se abonará el salario de noviembre a lo largo de esta misma semana.

Ante la palabra dada por Limasa ante el organismo oficial, la plantilla ha decidido en asamblea darle un voto más de confianza a la empresa y desconvocar los paros que tenían previsto empezar ayer mismo de no tener buenas noticias sobre sus sueldos. Si se cumple la promesa de Limasa, como espera la plantilla, los abonos se producirán a partir de hoy día 20 y podrán vivir las fiestas con cierto desahogo. No obstante, y según recordaron las afectadas, todavía quedaría pendiente la paga extra aunque no será hasta la semana que viene cuando empiecen a reclamarla. De momento, no hay fecha para el ingreso de la paga navideña.

La plantilla de la concesionaria municipal de limpieza es una de las más afectadas, junto con Acasa (encargada del servicio de ayuda a domicilio para unos mil usuarios) por los retrasos económicos en los últimos años. Precisamente, como señalaron ayer algunas empleadas de Limasa tras la asamblea en la que desconvocaron los paros, las trabajadoras no han cobrado en fecha ni uno solo de los 12 meses de 2011.

Esta vez la convocatoria de huelga había seguido los cauces legales pertinentes, al contrario de lo que ha ocurrido en dos ocasiones en los últimos dos meses, cuando no pudieron establecerse siquiera servicios mínimos que garantizaran la higiene de las aulas de Infantil y Primaria.

La buena noticia de ayer deja tranquilos a los centros escolares, que son los que sufren las consecuencias de los impagos a las trabajadoras de Limasa. En la última huelga, la Delegación Provincial de Educación estuvo a punto de decretar el cierre de varios centros escolares de la ciudad por insalubridad tras casi cuatro jornadas sin que la lejía asomara por aulas y aseos.

A expensas del transporte

Otro colectivo que se encuentra estos días a punto de iniciar una huelga es el del transporte público. Tanto el urbano como el rural tienen convocada huelga a partir de este viernes, 23 de diciembre. Los trabajadores de Urbanos Amarillos y representantes de la empresa se reunirán este jueves para intentar alcanzar un acuerdo que, en el caso de la plantilla, pasa por el cobro del salario de noviembre.

Si el dinero no llega antes a las cuentas de los empleados, la huelga se llevará a cabo entre el 23 de diciembre y el 17 de enero, de lunes a viernes excepto festivos. «La empresa dice ahora lo mismo que en otras ocasiones: que cuando pague el Ayuntamiento la parte que le corresponde, ellos podrán pagarnos a nosotros», contó el portavoz del comité de Urbanos Amarillos, Ángel Morales.