Fomento retrasa de nuevo la apertura del paso inferior de San José Obrero
El Ministerio comunica al Ayuntamiento el aplazamiento, que justifica por problemas eléctricos y de aguas pluviales en la obra
Actualizado:. Al final los temores de los vecinos de la zona de Hipercor se han cumplido, y el próximo lunes no se abrirá al tráfico el paso inferior que se está construyendo en el marco de las obras de la Alta Velocidad en Jerez, una infraestructura largamente demandada en la ciudad y que unirá esta parte del municipio con la barriada de San José Obrero.
Los residentes de Palos Blancos, una de las asociaciones más activas en la demanda de una mejor y más segura conexión entre estas dos barradas de Jerez, fueron informados el jueves por el delegado de Urbanismo, Antonio Saldaña, de este nuevo retraso en la puesta en marcha del vial, y la propia alcaldesa, María José García-Pelayo, se encargó ayer de confirmarlo tras la junta de gobierno local.
De esta forma, la regidora jerezana explicó ayer que la suspensión de la inauguración parte del Ministerio de Fomento, que envió hace unos días una carta a Urbanismo explicando que la finalización definitiva de la obra que atraviesa la avenida Voltaire y la conecta por fin con la avenida Caballero Bonald se retrasa.
Según parece, y tal como expuso ayer la primera edil, han surgido algunas dificultades relacionadas con la legalización del servicio eléctrico de esta infraestructura, así como problemas con las aguas pluviales, lo que obliga a demorar el trámite de entrega de la obra y de recepción por parte de la administración local.
Los vecinos de la zona ya habían escuchado estos días de los mismos responsables de esta obra que las pruebas que se hicieron en la bomba para achicar el agua de este paso inferior que pasa bajo el trazado de la alta velocidad no se habían podido llevar a buen término por problemas de cortes de luz. Según esas mismas fuentes, todos los demás trabajos ya han culminado y solo faltaría poder realizar esos tests para que el Ministerio de Fomento, que es el que promueve esta reforma, pueda darla por concluida y pasar el testigo al gobierno local.
En este sentido, la alcaldesa de Jerez no ocultó ayer la importancia que tiene que la obra no pase a manos del Consistorio hasta que se hayan realizado todas estas pruebas, de las que dijo que «son muy importantes, ya que al tratarse de un paso inferior hay que garantizar que esta infraestructura, que está en cota baja, no sufra inundaciones con la llegada de las lluvias».
Ese mismo argumento es el que se expuso desde el ejecutivo municipal el pasado jueves a los vecinos de Palos Blancos, a los que desde Urbanismo se les recalcó la necesidad de que este nuevo vial cuente con todas las garantías de seguridad una vez que se ponga en marcha.
Sea como fuere, desde el gobierno local insistieron ayer en que los motivos de la demora «no son imputables al Ayuntamiento». Por ese motivo, García-Pelayo tampoco se atrevió ayer a aventurar un nuevo plazo (ya ha habido al menos otros tres anteriores) para la apertura al tráfico del paso inferior, sobre todo porque «no depende de nosotros».
Eso sí, añadió que todo parece apuntar que la próxima semana deben solventarse los problemas técnicos, por lo que en breve se retomaría esta puesta en uso de la nueva infraestructura.
Eso es al menos los que esperan los residentes de esa parte de la ciudad, para los que esa conexión que une las avenidas Voltaire y Caballero Bonald viene de la mano del derribo del puente de San José Obrero, lo que se producirá un mes o mes y medio después de que empiece a utilizarse el paso subterráneo. Será entonces cuando se producirá la verdadera integración de los 13.000 vecinos de las zonas norte y este