Imagen de la web de la Casa Real donde aparecen los reyes junto a los duques de Palma, la infanta Elena y los príncipes de Asturias. :: EFE
ESPAÑA

La ley 'ata' a Urdangarin a la Familia Real

La Casa Real, en un comunicado, aclara que el apartamiento de las infantas de los actos oficiales no tiene que ver con la investigación Zarzuela, sin citar al duque, recuerda que no es decisión del rey quién es miembro de su familia

MADRID. Actualizado: Guardar
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O una reforma de la ley o el divorcio. El margen jurídico es muy estrecho, porque ni siquiera don Juan Carlos puede decidir de 'motu proprio' quién pertenece a su familia. Zarzuela, en el primer comunicado oficial relacionado con el 'caso Urdangarin' (al que en ningún momento cita), recuerda que la composición de la Familia Real está regulada por ley y que un adelgazamiento de esta, como se viene especulando en los últimos días para apartar al marido de la infanta Cristina del entorno del rey ante una posible imputación, solo podría ser posible si se reforma la normativa que regula el Registro Civil real. Unas modificaciones que Zarzuela ni confirma ni desmiente que estén en su agenda futura, aunque las fuentes oficiales sí que apuntan a que desde hace tiempo existe un plan, muy anterior al estallido de la 'operación Babel' y a los registros en las empresas del yerno de don Juan Carlos, para limitar la presencia de las infantas en actos oficiales, toda vez que el príncipe de Asturias ya tiene descendencia.

La Unidad de Relaciones con los Medios de Comunicación de la Casa Real puso ayer sobre la mesa el Real Decreto 2917/1981, por el que se «establece el Registro Civil de la Familia Real». El artículo primero de ese decreto textualmente fija que «en el Registro Civil de la familia real se inscribirán los nacimientos, matrimonios y defunciones, así como cualquier otro hecho o acto inscribible con arreglo a la legislación sobre Registro Civil, que afecten al Rey de España, su augusta consorte, sus ascendentes de primer grado, sus descendientes y al príncipe heredero de la Corona».

En la práctica -según fuentes jurídicas especialistas en la Corona- es que ese reglamento (única norma que regula la composición de la Familia Real) es el que eleva a quince los miembros de esa familia: los reyes, los príncipes, las hijas de estos (infantas Leonor y Sofía), la infanta Elena y sus dos vástagos (Felipe Juan y Victoria) y la infanta Cristina, Urdangarin y sus cuatro hijos (Juan, Pablo, Miguel e Irene).

Una reforma de este real decreto (para la que bastaría un acuerdo del Consejo de Ministros) podría adelgazar la Familia Real a los reyes, los príncipes y sus hijas, las seis personas que dependen exclusivamente de los presupuestos del Estado. Sin cambio legal, solo cabría un improbable divorcio de Cristina para apartar a Iñaki Urdangarin oficialmente de la Casa Real. Como ya ocurrió con la infanta Elena y Jaime de Marichalar, este último solo quedó fuera de la Familia Real y perdió todos sus títulos una vez que su divorcio se inscribió en el Registro Civil de Zarzuela, no antes. Ni siquiera una renuncia de la infanta Cristina a sus derechos dinásticos le apartaría, a ella y a su marido, de la Familia Real, de acuerdo a una interpretación estricta del real decreto aprobado hace ahora 30 años por el Gobierno de Leopoldo Calvo Sotelo.

Los especialistas en la Corona también subrayan que ni siquiera el apartamiento voluntario de Urdangarin, renunciando a todos sus títulos, del entorno real a través de un comunicado solemne (opción que se viene barajando desde hace ya semanas) le desvincularía ni legal ni oficialmente, por lo que, de ser acusado formalmente en el caso Palma Arena se convertiría igualmente en el primer miembro de la Familia Real imputado en la historia reciente de España.

«Profundo lamento»

La Unidad de Relaciones con los Medios de Comunicación en su nota oficial dice «lamentar profundamente» el «haber contribuido a que algunos medios hayan recogido de forma equívoca o errónea este tema». El miércoles, desde Zarzuela se hizo hincapié en el interés por rebajar la presencia en actos oficiales de las infantas. Ayer, la Casa del Rey aclaró que «las informaciones y comentarios» que hizo esa «Unidad de Relaciones» sobre el «número de actividades oficiales realizadas en los últimos años por los diferentes componentes de la Familia Real, nada tienen que ver con su pertenencia a la misma».

Los portavoces de Zarzuela aseguran que las actividades de Elena, Cristina e Iñaki Urdangarin han ido disminuyendo de forma progresiva en los últimos meses, sino años, pero que ese descenso nada tiene que ver con los avatares judiciales, sino con el hecho de que las infantas y el duque de Palma tienen que compatibilizar los actos oficiales con su vida profesional. Además, la Casa Real quiere «enriquecer» la agenda de los príncipes de Asturias.