Así será el nuevo gobierno económico
MADRID.Actualizado:La zona euro, en primera instancia, y la UE, en conjunto, se proponen dejar atrás la crisis de la deuda soberana, una brutal sacudida que aún puede dar al traste con el proyecto del área monetaria común, y quieren hacerlo estrechando vínculos y sometiéndose al control de unos por otros.
¿Qué principio es irrenunciable?
Las cuentas públicas de los países del euro deben tender al equilibrio, con un endeudamiento limitado en función de su capacidad de generar recursos, pero que no podrá superar el 60% del PIB. Los países incluirán en su legislación de mayor rango una 'regla de oro' que establecerá el tope de déficit. El Tribunal de Justicia de la UE asumirá competencias para vigilar la trasposición de esta medida a las legislaciones nacionales.
¿En qué situación está España?
Una vez aprobada por trámite de urgencia la reforma de la Constitución, falta sacar adelante el reglamento donde se concretará la limitación de los 'números rojos' de cada ejercicio y el futuro presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tiene este proyecto entre sus prioridades. España es uno de los países más avanzados.
¿Qué castigo se aplicará a los infractores?
La propuesta es limitar el techo de déficit al 3% del PIB en 2013. Merkel y Sarkozy han propuesto penalizar con sanciones automáticas a quienes sobrepasen ese nivel o el rango máximo de deuda, para el que se ha establecido un plazo más largo. No hay muchas pistas sobre las penalizaciones, salvo la mención que el pasado verano hizo el eje franco-alemán a la supresión de las transferencias de fondos estructurales y de cohesión.
¿Quién vigilará a los países en el camino hacia la disciplina?
La idea básica es el control de los pares. Los países con déficit excesivo estarían sujetos a que la Comisión y el Eurogrupo puedan revisar sus borradores de Presupuestos y pedir la inclusión de modificaciones si no se ajustan a los compromisos adquiridos con Bruselas.
¿Se puede imponer una disciplina fiscal sin armonizar los impuestos?
La propuesta de Francia y Alemania apuesta por una unión tributaria y laboral en la UE. Por eso en agosto Merkel y Sarkozy se plantearon avanzar, ellos solos, hacia similares tasas en el impuesto de Sociedades y en las cotizaciones empresariales. Ahora aseguran que el pacto «está abierto a todos», pero nadie ignora las dificultades cuando hay países como Irlanda que han hecho de los bajos tributos un estímulo económico y otros que defienden la soberanía de su actuación en esos ámbitos y apuestan por potenciar el mercado interior.
¿Qué mecanismos disuasorios o de rescate se plantean para los países más vulnerables?
El fondo de rescate permanente de la zona euro será el Mecanismo Europeo de Estabilidad. El poder de voto en este organismo está en función de la cuota de cada país en el BCE y a España le corresponde un 11,9%. Se plantea suprimir la exigencia de unanimidad en los acuerdos, de forma que una mayoría del 85% del voto sea suficiente. Funcionará como institución crediticia, lo que le permitirá pedir financiación al BCE, y el límite actual de su capacidad, 500.000 millones, será ampliado. Alemania dio marcha atrás en la participación del sector privado en futuros rescates. Merkel impuso una quita del 50% en el caso de Grecia: ahora la considera una excepción.