Un herido grave al chocar de frente un coche y un autobús en el puente

El guía del autobús viajaba en el asiento delantero y lo vio todo con más o menos claridad: «Fue todo demasiado rápido, no sé si el coche intentó adelantar a alguien, si perdió el control o evitaba chocar, sólo vimos que se cambió al carril interior y luego al nuestro. Casi se estampa con el coche que llevábamos delante, lo esquivó, pero no pudo evitar nuestro autobús», explicaba ayer, nervioso aún, mientras su teléfono echaba humo.

Eran alrededor de las 19.15 horas cuando un Seat León color azul oscuro se estampó de frente contra un autobús lleno de turistas que salían de Cádiz. El coche salió despedido con el frontal totalmente destrozado hacia la otra banda del puente y el joven que lo conducía, de algo menos de 30 años, quedó gravemente herido y atrapado en el interior, aunque consciente. Viajaba solo y se dirigía hacia Cádiz. Iba sin documentación, aunque el vehículo tenía bajo la matrícula (0172 GKF) indicaciones de un taller mecánico de la capital. A los pocos minutos del choque llegó a la zona una ambulancia del 061 y miembros del Consorcio Provincial de Bomberos, dispuestos a sacar a aquel joven del coche. Al parecer, estaba aprisionado por las piernas. Tras comprobar la estabilidad del vehículo y desconectar la batería, iniciaron las labores de excarcelación, arrancando la puerta lateral del conductor. En poco más de 15 minutos el joven estaba fuera, inmovilizado y la UVI lo trasladaba de urgencia al hospital Puerta del Mar. Su pronóstico era aún reservado, pero según los efectivos del 061, estaba gravemente herido, con politraumatismos.

Como explicó el guía a la Guardia Civil, el turismo circulaba por el carril de acceso a Cádiz, cuando de repente se introdujo en el carril reversible, abierto en ese momento en sentido a la ciudad, y por causas que aún se investigan, invadió el carril de salida. El conductor del autobús apenas pudo reaccionar.

Un pasajero en el hospital

El frontal del coche quedó desperdigado por la calzada, pisoteado por los coches sorprendidos por el accidente, que eran dirigidos por la Guardia Civil. De inmediato se desvió el tráfico por San Fernando, mientras se limpiaba la calzada. Sin duda, el Seat León fue el que se llevó la peor parte, aunque el autobús, unos cuantos metros detrás de él, quedó muy dañado e inutilizado, con parte del radiador a la vista.

En el interior, viajaban 25 personas. Algunas se quejaban de haber sufrido golpes en la cara, al chocar contra el asiento de delante por la inercia, aunque solo una de ellas fue trasladada al hospital con la nariz rota. Los pasajeros venían de Murcia y habían llegado por la mañana a Cádiz. En el momento del accidente se dirigían a su hotel en Jerez, para pasar los días de puente en la provincia. «Solo sentimos el porrazo», explicaban dos de ellos que viajaban detrás. El guía, en cambio, lo había visto todo, pero seguía sin explicarse por qué aquel coche se metió en su carril. «Ha sido más el susto y todo lo que conlleva -contaba por teléfono, mientras reorganizaba el viaje-. Sólo esperamos que el joven se recupere».