Las actividades organizadas ya superan a los mejores festivos

El Puente de la Inmaculada a la Constitución marca cada año el inicio de la temporada alta en la Sierra. Pero la cosa está cambiando. Además de que la crisis está haciendo que los hábitos que tienen los visitantes de la comarca sean distintos y ahora se apueste más por el alquiler de las casas rurales, las estancias cortas en hoteles y buscar precios baratos en restaurantes, también se están dando otras circunstancias que han convertido a esta fecha en una más, ganando importancia otros eventos que se vienen organizando.

En el caso de El Bosque, por ejemplo, este fin de semana está siendo como cualquier otro, a diferencia del lleno absoluto que la localidad registró hace solo una semana. Y es que la Recreación Histórica congregó a 2.500 visitantes y los bares y restaurantes estuvieron repletos. La alcaldesa del municipio recuerda que todos hicieron un «gran esfuerzo», destacando el trabajo conjunto que llevaron a cabo «todos los bares y restaurantes, la asociación histórica y todos los vecinos». El propietario del Hotel y Restaurante el Tabanco, Antonio Gil, reconoce que «este tipo de celebraciones están consiguiendo un gran éxito y hay que plantearse cómo ofrecer algo nuevo a la gente».

El éxito de esta Recreación se une a los que habitualmente tiene en mayo la de Algodonales, que es la pionera en la Sierra, y en octubre la de Grazalema. Todas ellas llenan hoteles, bares y restaurantes de la comarca. En el mismo vagón del éxito también se encuentra el Belén Viviente de Arcos que provoca que la localidad reciba millares de visitantes y los hoteles cuelguen el cartel de completo. Razón por la que hoteleros y hosteleros esperan con ganas el próximo día 17 para que tenga lugar esta celebración, siempre que la lluvia lo permita.

Estas experiencias están provocando que los empresarios serranos soliciten un mayor esfuerzo de las administraciones por poder ofrecer algo diferente que se una a la atractiva oferta de naturaleza, cultura e historia.