El partido de Putin vence pero pierde la mayoría absoluta
Rusia Unida obtiene alrededor del 50% de los votos, con un notable ascenso de los comunistas
MOSCÚActualizado:El partido oficialista Rusia Unida (RU) ha ganado las elecciones parlamentarias celebradas hoy, aunque muy debilitado en comparación con los anteriores comicios de 2007.
De acuerdo a los primeros resultados oficiales parciales, RU consigue alrededor del 50% de los votos. Le sigue el Partido Comunista, con casi el 20%. Ello significa que el partido oficialista pierde la mayoría constitucional (300 de los 450 escaños de la Duma o Cámara Baja) y, como ha destacado el presidente de Rusia y número uno de las lista de RU, Dmitri Medvédev, "tendrá que buscar apoyo de otros partidos".
De acuerdo a los primeros resultados oficiales preliminares, al menos otros dos partidos, el socialdemócrata Rusia Justa (RJ) y el nacionalista Partido Liberal Democrático, también accederían al Parlamento con el 12-13% de los sufragios.
Los beneficiados por la caída de popularidad de RU son ante todo los comunistas, que casi duplican el resultado de 2007 (11,57%), y Rusia Justa (7,74%). También han crecido los nacionalistas del excéntrico Vladímir Yirinovski, que hace cuatro años conquistaron un 7,74%.
No obstante, incluso si RU no llegara a alcanzar el 50% de votos emitidos, el reparto proporcional de escaños, tras quedar fuera los partidos que no superen la barrera del 7%, le promete ocupar, al menos, la mitad del arco parlamentario. Según los primeros resultados parciales, los otros tres partidos que han concurrido a las elecciones no habrían superado la barrera del 7%, el mínimo requerido para acceder al reparto proporcional de los 450 escaños de la cámara de diputados.
La crisis como causa de la bajada
"El partido (RU) ha conseguido un resultado digno, que se corresponde con su influencia política. La correlación que tendremos en la Duma reflejará la correlación real de fuerzas políticas en el país", ha recalcado el presidente ruso. Medvédev, quien ya ha sido declarado como eventual primer ministro tras la victoria oficialista, ha subrayado que "de hecho el 50% de la población apoya a RU".
También el actual primer ministro Vladímir Putin, presidente de RU y su candidato a la jefatura del Estado en los próximos comicios de marzo, ha calificado el resultado obtenido de "óptimo". Pese a todas las dificultades causadas por la crisis, ha dicho Putin, "RU se mantiene como principal fuerza" política de Rusia. "Es el resultado óptimo, que refleja la situación real en el país. (Este resultado) nos permitirá garantizar un desarrollo estable de nuestro Estado", ha declarado.
De la misma forma, Borís Grizlov, presidente del Consejo Supremo del partido oficialista, ha atribuido a la crisis la fuerte caída sufrida por su formación. Al proclamar la victoria de su partido poco después del cierre de los colegios, Grizlov destacaba que RU "seguirá siendo el partido gobernante", mientras que en varios países de Europa la crisis provocó la derrota electoral de los partidos gobernantes. "En medio de la crisis económica mundial hemos recibido el apoyo del electorado. Mientras en Reino Unido, España y Portugal en las elecciones de 2010-2011 cambiaron los partidos gobernantes, nosotros ya podemos decir que RU seguirá siendo (el partido) gobernante", remarcó.
Acusaciones de fraude
Tanto RU como los partidos opositores han denunciado las múltiples violaciones de la ley electoral detectadas durante la jornada de votación. Mientras los oficialistas han acusado a los opositores de "hacer campaña" durante la jornada, los opositores han denunciado fraudes a favor del partido gobernante. "Hemos detectado un mar de violaciones", declaraban los comunistas. "La geografía de las violaciones abarca todo el país", se hacía eco el nacionalista Partido Liberal Democrático. "Las elecciones se han convertido en el juego de 'pilla al falsificador con las manos en la masa'", remataba "Yábloko".
La jornada también ha quedado marcada por ataques distribuidos de denegación de servicio (DDOS) que han dejado inutilizadas las páginas web de la radio Eco de Moscú y la ONG de observación electoral 'Golos' (El Voto). Alexéi Venedíktov, director de Eco de Moscú, ha dicho que el ataque contra la emisora es "un intento de impedir que difunda información sobre irregularidades en las elecciones".