LA DAVIS AHUYENTA Y ATRAE
Actualizado:Qué tiempos tan revueltos. El líder Griñán confirmó 'in extremis' ayer su negativa a asistir a la final de la Copa Davis en el estadio fantasma de la Cartuja. Y expresó una coartada de corte insoslayable: «Tengo que ausentarme de Sevilla y la Davis dura tres días» (¿). El primer tapón, zurrapa, pensaría el juez Zoido, flamante alcalde del Consistorio sevillano. Horas después anunció lo mismo Alejandro Rojas Marcos, ex líder de aquel PA que tanto protagonismo tuvo en los albores democráticos y que tanto dio que hablar. Todos los demás alcaldes que han sido confirmaron su asistencia a la gran cita deportiva, estaban presentes.
En realidad, estamos viviendo unos tiempos muy extraños. Griñán se quita de en medio, el citado Rojas Marcos es el único ex alcalde de la democracia que ha rehusado su presencia en el llamado estadio Olímpico (que lo es), incluso Soledad Becerril, la única fémina que gobernó en la Alcaldía, anunció su presencia.
Estos fastos, deportivos, políticos o sociales, que súbitamente se derrumban sobre Sevilla, alegra profundamente al censo local y a su área de influencia. Pero, también, es un espacio público y urbano por dónde circulan viejas cuentas pendientes que pueden tardar centurias para sustanciarse. A la hora de redactar ayer este comentario, nada se sabía del notable Arenas, sumergido, por cierto, en una febril y gloriosa actividad política que, a la vez, le hace guiños sobre la presidencia de la Junta mientras Arenas se deja querer.
En cualquier caso, la casa socialista andaluza no está para festejos ni coheterías. Y es que hasta la sufrida coalición de IUCA ya le ve la matricula al maltrecho automóvil socialista. Y no es que la situación continental le quite el sueño a la estructura política de la presidencia del a Junta. Para nada. Ahora, bien, entre la Copa Davis y esta semana entrante que es más un acueducto kilométrico que un puente de relax, estos ejecutivos políticos a los que tanto debemos y tantos nos ofrecen anuncian que estarán en sus respectivas trincheras para que el Estado funcione Y la Patria andaluza no sufra una parada orgánica múltiple.