Fallece a los 70 años el diestro Diego Puerta
Numerosas personalidades del toreo se acercaron al Ayuntamiento de Sevilla para despedir a 'Diego Valor'
SEVILLA.Actualizado:El torero sevillano Diego Puerta falleció el martes en su domicilio de la localidad de Camas, a los 70 años, a causa de un fallo multiorgánico.
Fuentas consultadas por EFE informaron de que «en las últimas semanas se había agravado notablemente su estado, y que venía arrastrando numerosas secuelas de todos los percances sufridos durante su carrera a los que había que sumar la diabetes que padecía y las consecuencias del accidente de automóvil de hace algunos años».
Diego Puerta Diánez nació en Sevilla, en el barrio de San Bernardo, el 28 de mayo de 1941 y, tras debutar en los ruedos en Aracena (Huelva) en 1955 y tomar la alternativa en Sevilla en 1958, ocupó los primeros puestos del escalafón taurino en los años 60 y principios de los 70.
Su retirada de los ruedos se produjo el 12 de octubre de 1974 en la Maestranza de Sevilla en un mano a mano que protagonizó con Paco Camino.
La sede del Ayuntamiento de Sevilla acogió la capilla ardiente del diestro, a la que acudieron numerosos compañeros de profesión. Hoy al mediodía se celebrará un funeral en su memoria en la parroquia de San Bernardo, de cuya hermandad formaba parte, y posteriormente sus restos serán incinerados en el crematorio de La Algaba en la intimidad familiar, aunque es posible que el féretro sea trasladado antes a la plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla para dar una última vuelta al ruedo en el coso en el que tomó la alternativa.
Diego Puerta fue tan valiente en los ruedos que todo el mundo le conocía simple y llanamente como 'Diego Valor'. Un apelativo que justifica su actitud de arrojo frente a los casi mil toros que estoqueó a lo largo de los dieciséis años que duró su carrera como torero de alternativa.
Aunque más allá del valor como compromiso que le llevaría al triunfo la mayoría de las tardes, Puerta tuvo también una repajolera gracia para interpretar el toreo, lo mismo con el capote que con la muleta, de forma que por su personal estilo ha sido considerado también como uno de los más geniales representantes de lo que en la historia se conoce como escuela sevillana.
Así es como se puede hablar de un valiente, cuyo pequeño cuerpo quedó tatuado nada menos que por 55 cornadas, cuatro de ellas tan graves que terminaron en extremaunción. Fue el precio de tanto pundonor. Porque Puerta entendió la profesión de torero como un reto para ser siempre el primero. Pero nada puede opacar el mérito del artista, preocupado constantemente por la pureza en el trazo de lances y pases, y aportando garbo y un singular sentimiento a cada gesto y ademán.