Correa y Crespo guardan silencio ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León

Ni una palabra. Francisco Correa y el su número dos, Pablo Crespo, se negaron ayer a declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, que investiga la implicación de la trama 'Gürtel' el cobro de comisiones ilegales en la adjudicación a la empresa Teconsa por tres millones de euros de la variante de Olleros de Alba (León).

Correa llegó al tribunal en ambulancia y fuertemente escoltado. El otrora empresario de éxito, en prisión desde febrero de 2009, presentaba un aspecto muy desmejorado, incluso más delgado que durante sus últimas comparecencias hace un año ante la justicia madrileña. Apenas una hora y media después abandonó el Tribunal, con el mismo semblante serio con el que llegó y sin abrir la boca a pesar de la insistencia de los informadores. Todo lo contrario que Pablo Crespo, quien aprovechó la expectación mediática para presumir de los «grilletes marca Rubalcaba».

Tanto Crespo como Correa se acogieron a su derecho para no declarar ante el Tribunal que investiga la rama castellano-leonesa del 'caso Gürtel', después de que el instructor en Madrid del tronco central del sumario, el juez Antonio Pedreira, derivara a la sede de Burgos la investigación sobre el cobro de comisiones ilegales.