Javier Cano dimite de su cargo en la Diputación para salvar su partido

Javier Cano ya ha presentado su renuncia oficial como director de Recursos Humanos de la Diputación de Cádiz. Lo cierto es que se ha visto prácticamente obligado a ello tras el cisma que se ha producido en su partido político, Ciudadanos por San Fernando. Una ruptura que surgió tras convertirse en blanco de las críticas de un sector de la formación que no entendía su designación en un puesto de confianza de Diputación, administración que dirige el popular José Loaiza, cuando era concejal de la oposición en el Ayuntamiento de San Fernando, del que también es alcalde el propio José Loaiza.

A pesar de que Cano defiende que en ningún momento su labor como edil isleño se ha visto condicionada por un puesto de trabajo que asegura que es «fruto de una trayectoria intachable de carrera funcionarial con 20 años de antigüedad», lo cierto es que finalmente ha decidido dar este paso al considerar que se trata de la única manera en la que puede «intentar salvar un proyecto de ciudad que ha sido avalado por 3.000 personas con la ilusión de muchos colaboradores directos, entre los que no se encuentran precisamente los críticos del partido». Este sector proclamó una nueva cúpula de Ciudadanos y decidió colocar a un nuevo coordinador de la ejecutiva, Carlos Zambrano.

Actualmente Ciudadanos se mueve en un bicefalia con varios puntos de diferencia y entre las que ahora mismo existe un abismo. Para Cano este cisma se produjo principalmente como consecuencia de la falta de voluntad de los miembros del sector crítico a la apertura de una afiliación libre, lo que hizo que finalmente Cano se ausentara del congreso del que surgió un nuevo comité. Por su parte desde el bando de Carlos Zambrano no se ha entendido en ningún momento que su representante municipal aceptara un cargo de libre designación en la Diputación y que nunca diera explicaciones por ello. Al parecer han sido varias las ocasiones en las que han intentado ponerse en contacto con Cano sin éxito alguno, mientras que éste nunca reconoció ese congreso y se erigió como el coordinador oficial del partido.

Finalmente Javier Cano ha dado ahora un paso al frente renunciando a un puesto al que se considera merecedor por toda su trayectoria dentro de la administración provincial. Claro que lo hace para que se produzca una reacción. «Espero una respuesta del sector crítico para que se abra un procedimiento de afiliación libre sin fiscalización ni cribas de ningún tipo. Además de que se convoque el verdadero primer congreso del partido, para elegir la Junta Directiva y después se estudie la modificación de los estatutos originales del partido. De esta manera, se retiren los insultos que han proferido hacia mi persona y la concejal Mayte Mas Morate, identificándonos con ideologías fascistas».

Cabe recordar que desde la nueva ejecutiva del partido se solicitó la entrega del acta de concejal de Mayta Mas, si bien no se llegó a producir una petición oficial. Tampoco para que Javier Cano se fuera del partido si bien ante la falta de comunicación se tanteó esta posibilidad. Ahora se abre un nuevo camino y será el nuevo comité el que decida el siguiente paso, si bien las posiciones están muy enfrentadas y parece poco probable que ninguno dé a torcer su brazo. La impresión que da Ciudadanos es la de un partido roto, con un rumbo incierto.