Confianza. A pesar de los malos resultados cosechados por los azulinos en los últimos encuentros, jugadores, técnicos y directivos esperan lograr hoy una victoria. :: JAVIER FERGO
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Sin excusas

Jesús Mendoza realizará esta mañana una última prueba; en caso de no superarla será Lombán el que juegue en el lateral El Xerez pretende romper su racha negativa ante un Numancia que llega en su mejor momento

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Digan lo que digan, Merino se juega mucho esta tarde ante el Numancia. La dictadura de los resultados hace que el entrenador del Xerez esté en el punto de mira y sea el primer blanco al que el xerecismo dispare en caso de que se produzca un nuevo tropiezo ante el conjunto soriano. Por eso, es evidente que se la juega. Pero por suerte para el técnico del Deportivo, hoy acude a la batalla hiperprotegido. Con chaleco antibalas sobre su pecho, un casco, una codera, rodilleras y una red que amortiguaría su caída en caso de que el Numancia le haga perder el equilibrio y lo tire del alambre sobre el que camina tras seis partidos sin conocer la victoria. Emilio Viqueira y Antonio Millán se han cansado esta semana de repetir que pase lo que pase esta tarde en Chapín, Merino estará al frente del equipo en el duelo contra Las Palmas. Han sido el director deportivo y el presidente de la entidad los que han armado de tranquilidad al de La Línea para que pueda afrontar con garantías el importantísimo duelo contra el Numancia. Y está bien. Tanto uno como otro han hecho lo que deben. Dar tranquilidad en un momento de nerviosismo. Pero lo cierto es que la situación se puede volver insostenible si el Xerez acaba la jornada metido en los puestos de descenso, ya que por muy buen fútbol que haya realizado este equipo -por momentos- el choque entre la cruda realidad del Deportivo y el objetivo marcado al inicio de la temporada puede ser tremendo.

Y es que hoy debe aparecer el gran Xerez. Aquel equipo que maravilló no hace tanto ante conjuntos como el Celta, el Sabadell o el Girona. Por eso, y a pesar de las pruebas que ha realizado Merino esta semana, no se verán grandes cambios en el once titular que salte al maltrecho prado de Chapín. Es cierto que la línea defensiva puede presentar un aspecto muy diferente al de semanas atrás, pero en este caso concreto, son las bajas por sanción y por lesión las que obligan a Merino a variar la fisonomía de la retaguardia azulina. Y es que el técnico xerecista se ha quedado sin lateral derecho. Raúl Cámara debe cumplir sanción, pues vio la quinta cartulina amarilla ante el Valladolid, y su recambio, Alejandro Campano, no termina de salir de una lesión cuando se mete en otra. La primera de las soluciones en las que pensó Merino fue tirar de Jesús Mendoza. Colocar al jerezano en el flanco derecho y dar entrada a Raúl Llorente en la banda izquierda. Pero fue entonces cuando surgió un nuevo problema. Mendoza también está lesionado. No ha podido entrenar con el resto de sus compañeros durante toda la semana y solo un milagro puede hacer que supere la última prueba que iba a realizar esta mañana en el último entrenamiento (tras el que se dará a conocer la lista de convocados). Por eso, todo apunta a que será David Lombán el que tenga que actuar en el carril diestro de la defensa. Este movimiento también tendría sus consecuencias en el centro de la defensa, ya que Álvaro Silva se vería beneficiado y continuaría en el equipo titular. A su lado, tiene un puesto asegurado Miquel Robusté, que regresa tras cumplir su sanción.

El segundo de los cambios puede llegar en una de las bandas. Hay tres hombres para dos puestos. Israel, Pablo Redondo y Tato. El murciano se encuentra en un gran estado de forma y parece el mejor colocado para aparecer en una de las bandas. Sus ultimas actuaciones le han hecho ganar muchos enteros de cara a Merino y a la afición xerecista y todo apunta a que hoy regresará al once titular. Esto quiere decir que Redondo o Israel se quedarán fuera. El sevillano fue uno de los sacrificados la semana pasada en el segundo tiempo ante el Valladolid, pero Merino también ha probado esta semana sin Pablo Redondo, por lo que no habría que descartar nada.

En el resto del equipo no se esperan más variaciones pese a las pruebas (que iban más enfocadas a los encuentros del Xerez lejos de Chapín). El propio Merino se ha encargado de eliminar las dudas en el centro del campo ya que ha asegurado que Capi y Rueda estarán en el once. Por detrás de los dos peloteros repetirá Bruno Herrero, mientras que en la punta de ataque no cabe ningún tipo de dudas. José Mari será la referencia ofensiva de un Xerez que no lo tendrá nada fácil, pues hay que tener en cuenta que el Numancia llega en su mejor momento a Chapín.

Los de Pablo Machín solo tienen tres puntos más que los azulinos, pero ahora avanzan en línea ascendente como demuestran los diez puntos sumados en los últimos cinco partidos. En su contra tienen que todavía no han sido capaces de lograr un triunfo fuera de Los Pajaritos y que esta semana cuentan con varias bajas importantes. La principal es la de Julio Álvarez. El centrocampista venezolano es el hombre que hace funcionar al equipo, la pieza clave en la maquinaria ofensiva y el futbolista referencia en los lanzamientos de las jugadas a balón parado, pero no estará en Chapín porque se encuentra defendiendo los colores de su selección. Tampoco estará en Jerez un viejo conocido como Javier del Pino, pues arrastra molestias de pubis desde hace tres semanas y se encuentra en plena recuperación. Y por último Machín cuenta con la duda de la portería ya que Eduardo Navarro, portero titular, sufre algunas molestias físicas que le harán ser duda hasta el último momento. Por si acaso, el técnico del cuadro soriano se ha traído 19 convocados, entre los que se encuentra un portero del filial.

¿Y dónde está el peligro de este Numancia? Pues sin Julio Álvarez el mayor potencial de los rojillos está en las bandas. Especialmente en la izquierda con Cedric. Por la derecha entrará el media punta Natalio que ofrece una gran velocidad aunque no está muy fino de cara a gol. También habría que tener presente a Bedoya, el gran descubrimiento de la temporada para el Numancia. Se trata de un joven futbolista llegado del Getafe B al que le costó hacerse con un hueco en el once, pero que ahora está ofreciendo un buen rendimiento. En cuanto a la baja del citado Julio Álvarez, será cubierta por Sunny, quien estará acompañado por un Nagore que vive en su eterna juventud.