El laboratorio de Merino
El técnico azulino estudia realizar varios cambios de cara al duelo contra el Numancia
JEREZ.Actualizado:Las bajas, las sanciones y los malos resultados han obligado esta semana a Merino a entrar en su particular laboratorio en busca de la fórmula que saque al Xerez de la negativa dinámica en la que se encuentra y lo reconduzca hacia el camino del éxito. Por eso ayer estuvo realizando algunas pruebas de cara al encuentro del próximo sábado contra el Numancia.
El principal problema se encuentra en el lateral derecho. Hay que tener en cuenta que el técnico azulino cuenta con la baja por sanción de Raúl Cámara y por lesión de Alejandro Campano. Ninguno de los dos podrá estar disponible para el encuentro contra los sorianos. Además, preocupa mucho la recuperación de un Jesús Mendoza que sigue siendo duda porque ayer tampoco entrenó con el resto de sus compañeros. Ante tanto problema, Merino debe buscar una solución porque solo cuenta con Raúl Llorente como lateral disponible -a pesar de que también arrastre molestias en la espalda-. Por eso ayer probó durante un partidillo a David Lombán en el lateral derecho. El defensa de Avilés viene jugando de central derecho durante toda la temporada, pero parece que de tener que buscar una solución de emergencia sería el sacrificado para actuar pegado a la banda. Esto quiere decir que Álvaro Silva repetiría titularidad y jugaría junto a un Miquel Robusté, que regresa al equipo tras cumplir su sanción por acumulación de cartulinas amarillas.
Las pruebas no se acabaron ni mucho menos aquí. Es más, el cambio más brusco puede llegar en el centro del campo, donde Juan Merino probó con un nuevo trivote conformado por Rafa Barber, Miguel Ángel Cordero y Capi. En los últimos partidos, ante el Almería y el Valladolid, el centro del campo no funcionó con la fluidez y la rapidez de encuentros anteriores. Por eso no habría que descartar que el preparador linense materialice el sábado lo que probó ayer en su laboratorio. José Rueda y Bruno, serían los perjudicados, aunque tampoco habría que dar por hecho la permuta pues supondría quitar de un plumazo a dos de los hombres claves del buen juego del Xerez. Además, Merito también hizo jugar juntos durante algunos minutos al que viene siendo el trivote tradicional con Bruno Herrero, Capi y José Rueda.
Por último, Merino también baraja buscar un hueco en el equipo para Tato. En principio, parece que el sistema no sufrirá cambio alguno. Es decir, Tato no jugaría como acompañante de José Mari en el ataque del equipo. El murciano tendría un puesto en una de las bandas, lo que significa que habría tres hombres para dos puestos. Si Tato tiene un hueco casi asegurado, son Pablo Redondo e Israel los que se juegan el segundo. En las pruebas de ayer, Merino hizo rotaciones y probó todas las variantes posibles.
En total fueron cuatro las pruebas realizadas en el laboratorio de Merino. Y si a ellas se les unen las entradas de Raúl Llorente o la vuelta de Miquel Robusté, el sábado se podría ver un equipo bastante diferente al que saltó en Valladolid de inicio.
Uno de los que podría salir beneficiado de todos estos cambios podría ser Rafa Barber. El valenciano explicaba que Merino «suele probar bastante con dos sistemas, que son los que más estamos trabajando, y con los diferentes pivotes que hay en la plantilla. Hay mucha variedad y él está probando no solo para salir de inicio si no por lo que pueda pasar durante el partido». Obviamente, el centrocampista dice estar preparado por si el entrenador considera oportuno tirar de él: «Yo trabajo durante la semana como si el míster me fuera a poner el sábado. En cualquier momento puntual el técnico puede hacer un cambio de última hora y hay que estar preparado. Igual que me pasó a mí en la jornada seis, que le dio la oportunidad a otro compañero. Él estuvo preparado, lo aprovechó y ahora me toca esperar».
De cualquier manera, no niega que tiene que «coger ritmo de entrenamientos» porque ayer fue el segundo entrenamiento completo que realizó tras superar su lesión. Aún así, afirma que «uno siempre quiere jugar más. Eso es evidente. El míster decidió darle un cambio al equipo variando el sistema. En mi posición hay futbolistas que están jugando bien y seguro que va a volver a llegar mi oportunidad porque esto es muy largo y habrá ocasiones para todos».