105 años de cárcel a 'Txapote' por ordenar matar a Buesa

El dirigente socialista Fernando Buesa era un objetivo marcado en rojo por ETA. Durante la tregua de 1998, el entonces jefe militar de la organización, Javier García Gaztelu, 'Txapote', maduró el regreso a la actividad criminal con un asesinato sonado y ordenó a uno de sus comandos «intensificar» el seguimiento por las calles de Vitoria a Buesa.

El plan para matar a Buesa se gestó en un punto indeterminado del sur de Francia donde se escondía 'Txapote', al que la Audiencia Nacional condenó ayer a 105 años de prisión como autor intelectual del atentado. Allí mantuvo varias reuniones con el comando 'Ituren', Asier Carrera, Luis Mariñelarena y Diego Ugarte, para tener «información detallada a cerca de la vida y costumbres» del portavoz del PSE en el Parlamento vasco.

Durante un mes, los etarras siguieron a todas horas a Buesa, marcaron sus pasos, sus horarios y su actividad laboral. Y cuando decidieron ejecutar el atentado viajaron a Francia a recoger de manos de 'Txapote' una furgoneta con explosivos, armas, matrículas y placas falsas. Tras tres intentos fallidos, el 22 de febrero de 2000 el comando aparcó la Renault Exprés cargada con 20 kilos de dinamita y bolas de metal a modo de metralla, que accionaron a distancia cuando Buesa y su escolta pasaron por el lugar.

El tribunal que condenó a 'Txapote', al que obligó además a pagar 500.000 euros a las familias de los fallecidos, argumentó que los principales indicios criminales son las declaraciones de los etarras del comando 'Ituren', ya condenados por estos hechos. Otro elemento incriminatorio fue la libreta incautada al exjefe militar tras su detención en Francia con anotaciones de citas con comandos, entre ellos el que mató a Buesa y su escolta.

El tribunal, presidido por Ángela Murillo, es el primero en condenar a un miembro de ETA después del anuncio de la banda del cese definitivo de la violencia.