El infierno, a la vuelta de la esquina

El Xerez está en el límite. Se encuentra justo en esa frontera que divida la tierra del infierno ya que está demasiado cerca de la zona baja de la clasificación y de esos puestos que llevan a Segunda División B. Quizás es demasiado pronto para que salten las alarmas, pues el juego de los xerecistas invita al optimismo, pero no es menos cierto que una derrota del Deportivo ante el Valladolid metería de lleno a los hombres de Merino en la zona más caliente de Segunda División, con el peligro que ello conlleva. Y es que el Xerez no sería ni el primer ni el último gran equipo que entra en una mala dinámica y se complica la vida.

Por eso, los azulinos no deben superar esa barrera, no deben fallar más a pesar de que esta tarde se midan a uno de los grandes de la categoría. Y es que mientras el Xerez, a día de hoy, lucha por no meterse en la zona baja de la clasificación, el Valladolid puede acabar la jornada en el segundo puesto, y por tanto en ascenso directo, si es capaz de lograr los tres puntos en juego.

Los hombres de Djukic no están en su pico más alto de rendimiento de lo que va de temporada, pero sí que han mostrado una gran regularidad durante las once jornadas disputadas hasta la fecha. Algo que les ha permitido cumplir, de momento, con su objetivo, que no es otro que el de estar metido de lleno en la lucha por el ascenso. Los pucelanos tuvieron su mejor racha en los tres primeros encuentros, en los que acumularon tres victorias consecutivas. Esta semana vienen de perder ante Las Palmas, en la que ha sido su segunda derrota del curso, pero tras el gran inicio de Liga han alternado empates con victorias mostrando una gran regularidad.

Todo lo contrario que un Xerez que ya ha perdido cuatro partidos, solo ha ganado tres y ha dejado escapar diez de los doce últimos puntos en juego. El único argumento del Deportivo es su juego, aunque tras el mal partido ante el Almería se quedaron sin excusas. Ahora se la juega en Zorrilla y lo hace con una importante baja en defensa. Miquel Robusté se quedó en Jerez sancionado ya que vio la quinta cartulina amarilla la semana pasada. Álvaro Silva está llamado a ocupar esa plaza, pues es el único central con el que cuenta Juan Merino. Gerard Autet continúa con sus molestias en el tendón de Aquiles y por eso Juan Merino ha tenido que tirar del canterano Carlos Fernández para completar la lista en la parcela defensiva (ya que Rafa Barber, que también podría hacer las veces de central, también está lesionado).

El del centro de la defensa parece que no será el único cambio del equipo esta jornada. José Mari ya se ha ejercitado esta semana con normalidad y todo hace indicar que regresará al once titular. Merino es consciente que la situación no está para desperdiciar talento, y el delantero sevillano ha demostrado que es el que tiene mayor olfato goleador en esta plantilla. De cualquier manera, la vuelta de José Mari al once inicial no tiene porqué suponer que Tato regrese al banquillo. El murciano ha ofrecido un gran rendimiento en los últimos encuentros y no habría que descartar que fuera desplazado a una de las bandas. De darse este movimiento, Pablo Redondo tiene más papeletas que Israel para abandonar el equipo.

Novedades en el Valladolid

Por su parte, el Valladolid presentará la novedad de Marc Valiente y saldrá con el objetivo de olvidar su derrota en Las Palmas, además de proseguir su buena línea en casa donde solo ha perdido un partido. El entrenador del Real Valladolid, Miroslav Djukic, recupera para el once inicial al mencionado Marc Valiente que ha vuelto a la convocatoria, al igual que Nauzet Alemán.

Nauzet Alemán o Marquitos es la principal duda del técnico para la alineación inicial. Djukic ha reconocido esta semana que el equipo está «muy dolido» por la derrota ante Las Palmas, aunque ve con optimismo este partido ante el Xerez.