Los paraguas vuelven para quedarse

Aunque lo está haciendo con lentitud, el otoño está llegando ya irremediablemente a la ciudad. Las lluvias ya hicieron su aparición con fuerza en septiembre, también se dejaron sentir la semana pasada y apenas han dado un nuevo respiro. La alerta amarilla decretada por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) por agua y viento para la jornada de ayer se hizo notar, sobre todo, a partir de las 20.00 horas.

Un cielo cerrado gris estuvo el resto del día amenazando agua y los jerezanos no tuvieron más remedio que sacar los paraguas, botas y chubasqueros del armario ante lo que estaba por venir. Y la tormenta llegó, aunque un poco más tarde de lo previsto. Solo algún valiente confió en el sol que se asomó por la mañana para no ir precavido desde casa.

La previsión para hoy vuelve a colocar a las provincias occidentales con alerta amarilla por lluvia. La probabilidad del 100% se mantendrá durante todo el día y bajará un poco la intensidad del viento. Las temperaturas apenas variarán con respecto a las de ayer: la mínima se quedará en 15 grados y la máxima, en 23.

El viernes, también

La lluvia se quedará en la provincia hasta el sábado aunque el último día bajará de intensidad. Mañana viernes será otra jornada inexcusable de paraguas ya que la previsión de la AEMET es de un 100% de probabilidades de lluvia en las primeras horas del día un 95% por la tarde, aunque no se ha decretado alerta de ningún tipo. El descenso de las temperaturas sí será más acusado a partir de mañana aunque, para un 4 de noviembre, no es nada desdeñable una máxima de 20 grados. La mínima se quedará en 12. Ya el sábado volverá a salir el sol aunque el agua seguirá amenazando por la mañana con un 55%.

En total, 19 provincias estuvieron ayer en alerta por lluvias mientras que 37 lo estuvieron por vientos. El nivel naranja se decretó en la costa de La Coruña, Pontevedra, Ávila, el sur de Salamanca y el norte de Cáceres mientras que la amarilla se activó en el interior de La Coruña, Orense, León, Palencia, Zamora, Valladolid, Salamanca, el noroeste de Madrid y el sur de Segovia, Toledo, Cáceres, Badajoz y gran parte de Andalucía.