Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
ley de dependencia

En nómina por cuidar del abuelo

Cádiz es la segunda provincia española con mayor número de altas, lo que supone también una ayuda económica más para las familias

ELENA MARTOS
CÁDIZ.Actualizado:

El cuidado de los ancianos siempre ha quedado en casa. Son las esposas, hijas o nueras las que dedican tiempo y esfuerzo a la atención de sus mayores. Fueron educadas en otra época, con valores y cargos de conciencia que hoy cuesta entender. Ahora, mantienen el peso de la dependencia dentro de los hogares, una labor que empieza a tener reconocimiento. La ley, aprobada hace ya cuatro años ha cambiado esa realidad perpetuada durante décadas.

Los cuidadores no profesionales tienen reconocido su derecho a ser dados de alta en la Seguridad Social y percibir una pequeña prestación por los servicios. La percepción de la mayoría de los solicitantes es la posibilidad de obtener una «paguita» que suman a la pensión del abuelo y sirve para ir tirando. En algunas ocasiones es ya el único ingreso que entra en el hogar.

Un total de 11.239 cuidadores no profesionales cotizan ya en la provincia, según los datos que recoge el Imserso, dependiente del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad a fecha de 1 de septiembre. De esta manera, Cádiz no solo se sitúa a la cabeza de Andalucía en número de altas, sino que ocupa el segundo puesto en toda España, solo superada por Barcelona.

Además del desarrollo de la ley en la comunidad -la que mayor avance ha hecho en la atención a la dependencia- la situación económica de los hogares gaditanos es más que preocupante y esta posibilidad supone la entrada de un ingreso extra. No es la finalidad de la norma, pero es ya una ayuda para las familias.

El secretario general de Empleo de UGT Cádiz, Miguel Abreu, está convencido de que «la enorme tasa de paro de la provincia tiene mucho que ver en el balance». Según explica, «las familias prefieren solicitar este recurso y atender a los dependientes porque tienen tiempo para ello y les reporta un beneficio económico que necesitan».

Por otro lado, Abreu resalta que «la atención a los mayores está más arraigada en el sur que en el resto de España». El responsable sindical consideró que la situación laboral de la provincia es tal que «se ha hecho necesario aprovechar cualquier recurso». Aunque el importe de las prestaciones es reducido. La media oscila entre los 300 y los 520 euros en función del tiempo que se dedique al dependiente y de su grado de afectación.

Los cuidadores no profesionales cotizan a la Seguridad Social, pero no tienen derecho a la prestación por desempleo tras el fallecimiento del familiar o el cese del servicio. «Eso queda claramente plasmado en la norma y también se advierte cuando llega la confirmación por escrito», explican desde CC OO.

El sindicato también atribuye el enorme volumen de la provincia al aumento del desempleo y considera que se trata de un «excelente indicador» para tomarle el pulso al mercado de trabajo gaditano. De hecho, el mayor crecimiento de las altas de cuidadores no profesionales se produjo en 2009, cuando se consolidó la medida y comenzó la sangría de pérdida de puestos de trabajo. En un solo año el registro pasó de 2.389 a 7.026 cotizantes. Y superó los 10.000 en 2010.

Ese alta sirve para «reconocer de manera legal el trabajo que realizan y justificar la paga que reciben, pero nada más». Fuentes sindicales señalan también que «la cotización se computa como una media jornada y puede beneficiar a aquellos que necesiten completar algún plazo para completar el tiempo mínimo que exige la pensión de jubilación, pero eso son excepciones.