Irene Villa en su comparecencia en el CRMF-Imserso. | C. C.
Fin de las armas de ETA

«Cómo va a ser inmaduro que se disuelva ETA, lo de locos es matar»

Irene Villa habla del atentado que sufrió en 1991 a los jóvenes discapacitados del CRMF de La Isla y asegura que no hace falta «que me pidan perdón porque yo ya he perdonado»

San Fernando Actualizado: Guardar
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El 17 de octubre de 1991 sufrió un grave atentado de la banda terrorista ETA con coche bomba en la calle Camarena del madrileño distrito de Latina, al producirse el estallido de una bomba adosada al vehículo en el que viajaba, camino del colegio, con su madre. Irene Villa de 12 años, perdió las piernas y tres dedos de una mano. Su madre perdió una pierna y un brazo. Mientras contaba esta mañana su historia todo el auditorio del CRMF-IMserso de San Fernando permaneció en silencio atento, sobre todo por la claridad y la contundencia con la que lo relata, con la humanidad que desprende en cada palabra. La misma contundencia que muestra a la hora de hablar del nuevo anuncio de dejar las armas de ETA.

«Es lo que llevo esperando desde hace 20 años y se ha cumplido mi deseo a medias porque no se disuelve. Ahora dicen que lo inmaduro es pedir que se disuelva y lo que yo pienso que es de locos es matar. Lo irracional es asesinar. Pero lo que más inmaduro me parece es que el que ha asesinado pretenda conseguir algunos de sus objetivos y eso sí qué es duro e irracional. Conozco a viudas de San Fernando, de Cádiz y de toda España que tampoco lo entienden porque si hay beneficios para ETA también la merecen entonces otros asesinos, porque en ETA hay asesinos». Por ello no faltará a la manifestación que este sábado habrá en Madrid en la plaza de la Repúblicana Dominicana donde mataron a doce guardias civiles. Allí solicitará que no haya concesiones a la banda.

El anuncio

Ella se enteró del anuncio en Zaragoza mientras preparaba unas jornadas y por un mensaje de texto de su marido. «Fue un momento de euforia hasta que vi el comunicado y que pretenden seguir negociando con Francia y con España, cuando vi que no van a desistir... porque lo que muchos nos tememos es que si no consiguen nada volverán a las armas. Quiero pensar que esto no ocurrirá».

En cuanto a las voces que exigen que ETA pida perdón «Yo sí he perdonado porque quiero vivir y no sé puede hacer si piensa que hay alguien que te ha querido matar. La víctima puede perdonar pero ningún juez puede hacer lo mismo al que ha matado. A mí me da exactamente igual que me pidan perdón o no porque yo ya les he perdonado. No cambia nada que pidan perdón, lo que vale es que desaparezca y que se cumplan sus condenas. La duda queda de que no haya contrapartidas, yo me limito a pedir lo de siempre: memoria, dignidad y justicia».