Cinco recorridos por el pasado gaditano

Si se le invita a recolectar burgaíllos, lapas u ostiones en la costa de Chipiona, quizá ni se le ocurra pensar que está realizando una actividad que tiene que ver con la Arqueología. Pues debe hacerlo. Los corrales de pesca de esta localidad gaditana forman un original conjunto histórico, cultural y paisajístico, herencia de una cultura pescadora rural antigua, presumiblemente romana o árabe. Y eso es Arqueología. Este sábado podrá comprobarlo. El 29 de octubre se celebran las Jornadas Europeas de Patrimonio y Cádiz, al igual que el resto de provincias andaluzas, las dedicará a explicar la relación entre la Arqueología y el paisaje. Ese es el título que enmarca esta edición de la cita, que se viene celebrando en Andalucía desde 1992.

El programa en la provincia, preparado por la delegación de Cultura y el Gabinete Pedagógico de Bellas Artes de Cádiz (Educación), incluye para este sábado las visitas guiadas a cinco enclaves de la provincia -recorrida de punta a punta- con mucha historia. En Cádiz capital, la Factoría de salazones (siglo I a. C); en El Puerto de Santa María, el Yacimiento Arqueológico Doña Blanca (siglos VIII-III a. C.), el Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia (siglo II a. C./ VII d. C.), en Tarifa, el Dolmen de Alberite de Villamartín (4.000 a. C.) y el Corral de Cabito (corral de pesquería), de Chipiona.

El responsable del Gabinete Pedagógico de Bellas Artes de Cádiz, Miguel Ángel Valencia, explicó ayer junto a la delegada de Cultura, Yolanda Peinado, los porqués de esta extensa elección. «Queremos ejemplificar cómo es la relación de los yacimientos con sus paisajes, cómo las diferentes épocas han ido modificándolos y observar qué cosas han persistido».

Con un personal más numeroso y cualificado como guías, los visitantes se llevarán una visión más completa de estas cinco joyas de la provincia. «La fábrica de salazones es interesante como tal, pero más teniendo en cuenta que se estableció al borde del canal Bahía Caleta que cruzaba y dividía Cádiz», subrayó Valencia. El tesoro más mimado de la provincia, el Conjunto Arqueológico de Baelo Claudia, frente a la playa, o el yacimiento de Doña Blanca mirando a Gadir y con el imponente paso del Guadalete, son otras de las opciones para participar de las Jornadas, que en anteriores ediciones ha llegado a contar con la asistencia de casi 4.000 personas. Aún más atrás en el tiempo, el Dolmen de Alberite, en Villamartín. «Son lugares contagiados de magia, estas tumbas buscan la eternidad. Es algo que cobra dimensión con la serranía al fondo. El de Alberite, además, se sitúa en una línea que lo enlaza con el de Antequera, el más importante de Andalucía», apuntó el responsable.

La Delegación de Cultura pone autobuses gratuitos al servicio de los interesados en asistir a cualquiera de las citas programadas. A partir de mañana y hasta el viernes se pueden retirar dos tickets por itinerario en el Gabinete Pedagógico de Bellas Artes de Cádiz, en la calle Tinte.

Las Jornadas Europeas de Patrimonio tiene como objetivo permitir el acceso gratuito a monumentos y sitios que habitualmente no están abiertos al público, así como dar a conocer elementos patrimoniales a la ciudadanía en general, y fomentar la tolerancia hacia otras culturas, históricas o actuales, incidiendo en la necesidad de su conservación y defensa. En este sentido, Miguel Ángel Valencia recordó que ya se han realizado actividades previas relacionadas con la cita del sábado. En concreto, un curso de patrimonio arqueológico destinado a profesores de la provincia.