El Atlético, otra vez impotente

Al menos marcó de penalti para sumar un punto insulso. De penalti más que dudoso, pero válido para romper su desastrosa racha, aunque insuficiente para que el Atlético levante el vuelo y recupere la ilusión y la autoestima perdida en el último mes, desde la 'manita' del Camp Nou. Fernández Borbalán quiso compensar el inexistente penalti que señaló a favor del Mallorca cuando solo se llevaban 20 segundos de partido y, gracias a un leve empujón de Ramis a Falcao, el 'Atleti' sacó otro empate en casa, aunque su fútbol volvió a ser muy pobre, sin juego por las bandas y sin capacidad de sorpresa ante el ordenaro Mallorca.

El Atlético volvió a tener enormes dificultades para crear ocasiones de gol, y en las escasas de las que dispuso le falló de nuevo la puntería. Al Mallorca, que estuvo echado atrás todo el encuentro, le bastó con su organización defensiva para anular a los rojiblancos, cuyo dominio volvió a resultar estéril, sin saber qué hacer con el balón, con una lentitud exasperante, y sin profundidad. Parece que ya da lo mismo que jueguen juntos Falcao, Diego, Arda Turan e incluso Adrián, y que Manzano juegue con tres o con dos delanteros, porque cuando el Atlético se encuentra con un rival encerrado se muestra impotente. En esta ocasión no acabó sufriendo en su área, porque el Mallorca renunció al fútbol.

Caparrós prefirió que su equipo defendiese exclusivamente, y le salió perfecto, mientras que Manzano sigue perdiendo crédito.

Este 'Atleti' sigue cuesta abajo, incapaz de reflejar en el marcador su superioridad. Puede dominar y controlar durante todo un día, pero las ocasiones de gol brillan por su ausencia. Ante el Mallorca solo tuvo dos realmente claras, cuando el balón fue siempre suyo y dispone de jugadores de calidad suficiente para desequilibrar. Entre ellos, Diego no transmite alegría, y Falcao no tiene nada que ver con el de principio de temporada, aunque es verdad que no le llegan balones y tuvo que agradecer al árbitro que le permitiese acabar con su nefasta y prolongada racha sin gol.

Ramis le empujó un poquito en el área al final de la primera parte, y aunque el colombiano exageró tanto la caída que pareció tirarse a la piscina, el colegiado pitó la pena máxima. Para equilibrar el penalti inventado nada más arrancar el duelo, cuando Sílvio encogió el brazo en una acción totalmente involuntaria.

Al Atlético se le ha perdido el respeto en el Calderón, donde ya lleva tres empates en cinco partidos, y si ya no tiene bastante con su falta de remate y su incapacidad para llegar a la portería contraria y encontrar espacios, solo le falta que le castiguen sin sentido. En cualquier caso, el primer disparo del 'Atleti' a portería, aparte del penalti marcado por Falcao, no llegó hasta el minuto 44. Muy elocuente para un equipo que, sin carácter ni fe, vuelve a ser el de siempre y se tiró toda la segunda mitad intentándolo, sin conseguirlo, porque le faltan ideas y mordiente... y balones a la cabeza de Falcao. La ocasión más clara la tuvo Adrián en el arranque de esa segunda parte en la que solo Reyes aportó algo diferente, pero apenas nada. Manzano, cuya primera etapa en el Atlético no fue nada buena, no escapa del peligro. El banquillo rojiblanco vuelve a quemar.