La basura comienza a acumularse en las calles

La primera jornada de huelga de limpieza y recogida de basuras se está desarrollando sin incidentes. Los servicios mínimos -dos camiones de recogida y ocho peones- han funcionado correctamente y los trabajadores pasan sus turnos concentrados en el Cemulimp del polígono Las Salinas, donde se encuentran los almacenes municipales.

Los sindicatos han convocado el paro porque aún no han cobrado la totalidad de sus salarios y la empresa concesionaria del servicio municipal, FCC, no les garantiza que vayan a cobrar las nóminas de octubre. FCC alega que el Ayuntamiento le debe veinte millones de euros y que en el último año no le ha pagado la totalidad del canon -800.000 euros- prácticamente ningún mes. Por el momento nadie ha movido ficha y todo apunta a que la huelga continuará al menos hasta el lunes.

Pero veinticuatro horas ya han sido suficientes para que la basura comience a acumularse en las calles. Los contenedores comienzan a rebosar bolsas y la vía pública, al menos en el centro de la ciudad, presenta un deplorable estado con papeles, bolsas de plástico, etc. Muchas papeleras también están al límite y en las calles peatonales los vecinos han depositado fuera las bolsas con lo que el mal olor y la imagen de la ciudad empeora por horas.