Las sorpresas no gustan al Barça

El Barça no debería tener problemas para superar en el Camp Nou al modesto Viktoria Plzen, campeón de la Liga de la República Checa la pasada temporada y solo cuarto en el actual curso. Pese a las bajas por lesión de Cesc, Piqué, Alexis y Afellay, se especula con la posibilidad de que Pep Guardiola apueste por un once con jugadores menos habituales como Fontàs o Maxwell, aunque el técnico azulgrana suele extremar las precauciones para evitar las sorpresas por débil que sea el rival. De hecho, el Barça sigue lastrado en el Grupo H de la Liga de Campeones por el empate que cedió en la primera jornada como local ante el Milan, una circunstancia que le obliga a conquistar los tres puntos. Además, aunque luego no pasaron una grave factura, en el pasado reciente, ya con el de Santpedor en el banquillo, existen un par de tropiezos inesperados ante el Shakhtar Donetsk ucraniano y el Rubin Kazan ruso.

Pero este Viktoria Plzen, con solo jugadores checos en sus filas (un par de ellos, Kolar y Jiracek, se enfrentaron a España en el reciente 0-2), es incluso inferior a los dos clubs citados que un día se atrevieron a ganar en el Camp Nou. Su pelea está enfocada a lograr la tercera plaza para saltar a la Europa League y su enemigo es el BATE Borisov bielorruso, con quien empató 1-1 en la primera jornada. En la segunda dio una buena imagen en Milán, pero cayó 2-0, al mismo tiempo que el Barça ganaba 0-5 en Minsk al BATE, una 'manita' que quizás sea la diferencia real entre los equipos que pisen hoy el césped azulgrana. Los 4.000 checos que llegarán con el Viktoria se conforman con haber hecho historia visitando al Barça. Para ello, los jugadores de Pavel Vrba eliminaron a Pyunik, Rosenborg y Copenhague en las eliminatoria previas, con el mérito que tiene haber dejado en la cuneta a dos clásicos del fútbol escandinavo.

Así las cosas, se intuye que es una buena oportunidad para que Messi, que nunca entra en las rotaciones, se acerque a los 200 goles oficiales como barcelonista. De momento suma 196 y tendrá como aliados a Pedro y Villa en su búsqueda del gol. Sin Cesc optando a entrar en la media punta, no parece peligrar la titularidad de los dos internacionales españoles.

En la media son fijos Xavi y el recuperado Iniesta, que podrían estar acompañados de Sergio Busquets y Thiago, un estilista que cada día está más adaptado a una labor sacrificada.

Y en la zaga de tres se intuye el regreso de Mascherano junto a Alves y quizás Abidal, con opciones para Puyol si el argentino hiciera de Busquets en el pivote. Posibilidades tácticas hay muchas, pero obligación solo una: sumar los tres puntos para seguir defendiendo el título con la posibilidad de pasar a octavos como primero. Si falla alguien antes del pulso de San Siro, que sea el Milan, no el Barça.

Guardiola, sincero

Por su parte, el entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, ha admitido conocer poco del Viktoria Plzen, aunque ha animado a «tomárselo en serio» a sus jugadores y a los periodistas que han cubierto su rueda de prensa en el Camp Nou.

«Es normal que Abidal dijera que no conocía al Viktoria Plzen. Yo no había visto un partido de ellos hasta hace dos días, pero es algo normal. Tampoco el primer año contra el Basilea. Y al Rubin Kazan o al Copenhague tampoco los había visto hasta poco antes de jugar con ellos», argumenta. Sin embargo, tras estudiar a su rival, ha advertido que se trata de «un equipo muy agresivo» que defiende muy bien. «Eliminaron al Rosenborg y hay que tomárselo en serio», ha insistido Guardiola.