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El Madrid acaricia los octavos

Los de ‘Mou’ avasallaron en juego, posesión y goles a un Lyon menor

I. TYLKO
MADRIDActualizado:

Objetivo cumplido, y con creces. José Mourinho arengó a su tropa sobre la importancia de superar al Lyon para dejar virtualmente sellado el pase a octavos y luego poder rotar pensando en el Barça, y sus soldados entendieron al mensaje. Dirigidos con maestría por Xabi Alonso, completaron un partido notable ante los galos y demostraron que también pueden disfrutar y golear con el balón en su poder, no solo al contragolpe.

Dejó claro ‘Mou’ que disponer de Higuaín y de Benzema a punto es todo menos un problema. Apostó por el lionés ante sus ex y le respondió a la confianza con un gol, una asistencia y un esfuerzo generoso. Esta vez, no alineó en ningún momento juntos a Özil y Kaká, lo que avanza sus intenciones para los partidos grandes.

El bloque del Lyon es similar al del año pasado pero sus exigencias menores. Ha cedido la responsabilidad de tener que ganar al Marsella y al PSG en su país, y se conforma con superar la primera fase en la ‘Champions’. Jean-Michel Aulas, su otrora soberbio y ambicioso propietario que soñaba con conquistar la Copa de Europa, ya apenas invierte. Deja trabajar con la cantera al joven Rémi Garde, un tipo de la casa muy querido y, según dicen, discípulo aventajado de Wenger.

Planteó un partido muy defensivo en Chamartín. Como un equipo modesto. Nada de presionar tan arriba como el Ajax. Y eso que a última hora se le cayó Gonalons, su medio defensivo, y dio entrada al elegante y ofensivo Gourcouff. Fue su primer partido como titular desde que se lesionó de gravedad hace casi medio año y evidenció estar fuera de punto.

La sociedad Marcelo-Cristiano

Sabido es que el Madrid sufre más cuando tiene que llevar la iniciativa y que no acostumbra a acumular el doble de posesión que sus rivales, pero se lo tomó con naturalidad y paciencia. Atacó pero siempre pendiente de no ser sorprendido en algún contragolpe. Nada de probar su propia medicina. Percutió sobre todo por la izquierda, donde la sociedad Marcelo-Cristiano es letal por potencia y velocidad. Firmaron una pared infinita al que le faltó solo un mejor final.

Los blancos tiraron de estrategia para abrir la lata francesa. Un córner bien tocado por Özil, un salto prodigioso de Cristiano, su balón peinado y el remate a placer de Benzema. Llegaban el francés y también Ramos completamente solos en el segundo palo. Debieron cerrar los blancos el partido en el primer tiempo pero lo evitó un error de bulto del colegiado turco. Se puso a contar los pasos sin que nadie le pidiera y no dio validez al saque rápido de Xabi Alonso y el remate posterior de Karim. La acción se saldó con amarilla para el donostiarra.

Menos mal que los jueces sí acertaron en la otra área al anular un golazo de Gomis por fuera de juego. Había sido la única vez que contactó con su socio Bastos, muy bien vigilado por Arbeloa, ayudado por Khedira en ausencia del lesionado Lass. El Lyon es muy inferior pero tiene gente muy rápida que te puede complicar la vida al menos descuido.

Si Garde tenía otro plan para el segundo acto, se le truncó enseguida. Benzema, muy atento, se aprovechó de un resbalón y le puso el gol en bandeja a Khedira. La cita quedaba resuelta con muchos minutos por delante. Y más después de que entre Lloris y un defensa convirtieran en autogol un centro regular de Özil. Cristiano quería marcar. Lo buscó, lo consiguió pero se lo anularon porque Kaká pasaba por ahí. Suma tres partidos sin ver puerta. El broche lo puso Ramos en otro saque de esquina defendido de pena.