Alemania enfría a los mercados
El Ibex cierra la sesión con un recorte del 1,24% y se sitúa en los 8.864,30 puntos
MADRIDActualizado:Las cosas iban bien en el Ibex. El selectivo español se mantenía por encima de los 9.000 puntos durante la mayor parte de la sesión, hasta las cuatro de la tarde. En el mercado cotizaban al alza las conclusiones de la reunión de los ministros de Finanzas del G-20 este fin de semana en París a favor de una recapitalización de la banca, del refuerzo del fondo de rescate europeo para revertir el efecto contagio. El G-20 pareció confiado en que la reunión de los líderes europeo el próximo 23 de octubre traerá buenas noticias. La agenda económica traía muy poco más en el Viejo Continente. Aunque el primer ministro griego, Yorgos Papandreou, en su twitter, escribía: "Comenzó la semana más importante de los últimos 18 meses. Nos enfrentamos a importantes negociaciones hasta el 23 de octubre". Y también: "Nos esforzamos por poner fin a la incertidumbre. En cuanto a Grecia, para el conjunto de Europa".
¿Qué sucedió a las cuatro de la tarde? Simplemente, que el Gobierno alemán advirtió de que no debíamos hacernos demasiadas ilusiones con el Consejo europeo que tendrá lugar el próximo 23 de octubre. "Los sueños que ahora se están consolidando de que con este acuerdo todo se habrá solucionado y que los problemas habrán terminado el lunes no podrán hacerse realidad", afirmó Steffen Seibert, portavoz de la canciller alemana, Angela Merkel. Los mercados han comprado el rumor de que la crisis se habrá terminado el lunes e irán vendiendo a medida que nos vayamos acercando a la fecha clave, según comentan algunos analistas. Si los mandatarios europeos fallan otra vez en la resolución de la crisis de deuda, el sistema financiero seguirá tocado, lo que implica que habrá muchas dificultades para que la recuperación siga adelante. Alemania, por lo pronto, ha preferido enfriar los ánimos.
Pérdidas en el resto de parqués
Por eso, el Ibex fue cayendo del entorno de los 9.000 puntos hasta los 8.864,30 puntos a los que cerró, lo que supuso un recorte del 1,24%. Aunque marcó mínimos de la sesión un poco más abajo, en los 8.825 puntos. Los descensos en otras plazas europeas fueron superiores: el Ftse Mib de Milán cedió un 2,30%, el Dax alemán, un 1,81%, y el Cac 40 francés, un 1,61%. Y, de nuevo, los valores que más sufrieron, los bancos: Unicrédito fue el más castigado dentro del Eurostoxx 50, con un recorte del 6,12%. A continuación, Intesa San Paolo, que perdió un 5,32%. BNP Paribas y Deutsche Bank también perdieron más de un 3%. Y, junto a los bancos, los fabricantes de automóviles, por ejemplo. Y ArcelorMittal. Sólo tres valores del índice paneuropeo cerraron la jornada al alza: L'Oreal, Inditex y SAP.
En el Ibex, muy pocas compañías se salvaron de los descensos. Sacyr Vallehermoso, imparable, lideró de nuevo los ascensos, con una revalorización del 2,12%. En el año ya acumula una revalorización superior al 20%. A continuación, Mapfre, que subió un 1,43%, hasta los 2,55 euros, pese a la rebaja de "rating" que sufría por la mañana. Después, Inditex, que ganó un 0,55%. Dos entidades financieras, Sabadell y Bankia, completaron la lista de valores en verde, con ganancias de un 0,34% y de un 0,03%, respectivamente.
Los bancos españoles no sufrieron descensos muy pronunciados: Bankinter cedió algo más de medio punto porcentual, Santander y CaixaBank, alrededor de un 0,7%. El Popular, algo más de un 1%. Pero el peor de todos fue BBVA, que perdió un 1,32%.
El peor valor de la jornada fue Mediaset, con un descenso del 4,39%. A continuación, las compañías acereras: ArcelorMittal perdió un 3,70% y Acerinox, un 2,98%. De hecho, las empresas más cíclicas fueron las que más acusaron las declaraciones del portavoz de Angela Merkel. Entre los valores que más cayeron, también Endesa, Técnicas Reunidas y OHL, que perdieron más de un 2%.
Fuera del Ibex, destacó NH Hoteles, que se disparó más de un 14%, después de que el grupo chino HNA comprara un 20% de la compañía. La operación se anunció el 10 de mayo, cuando el grupo se comprometió a pagar 431,6 millones de euros por esa participación, aunque al final el precio ha quedado rebajado hasta los 329,8 millones de euros. Quizá el mercado dudaba que la operación culminara. Los peores valores de la jornada fueron Zeltia y la CAM, que perdieron más de un 5%.
A las Bolsas no les ayudó la agenda macroeconómica de Estados Unidos. El índice manufacturero Empire State no mejoró de acuerdo con lo esperado en octubre. La producción industrial en septiembre creció un 0,2%, según lo previsto, pero el dato del mes anterior se revisó a la baja del 0,2% al 0%. Y el nivel de uso de la capacidad instalada creció sólo una décima, hasta el 77,4%, una décima menos de lo previsto, después también de haberse revisado a la baja el dato del mes anterior.
Tampoco sentaron bien los resultados de Wells Fargo: pese a cumplir expectativas y alcanzar un beneficio récord, no gustó que cayeran sus ingresos en el tercer trimestre ni que sus márgenes se estrecharan. Las cuentas de Citi gustaron un poco más, dado que batió las expectativas de los expertos, dado que sus beneficios aumentaron un 74%.
Por eso, los indicadores de renta variable estadounidenses también comenzaban la sesión con descensos. Pero es que también hay que tener en cuenta que la semana pasada el S&P 500 subió un 6%, el mayor ascenso desde julio de 2009. Y que ese índice se encuentra muy cerca de los 1.230,71 puntos, nivel que ha actuado como techo durante los dos últimos meses.
Aumento de la prima de riesgo
En el mercado de deuda, deterioro. La prima de riesgo de la deuda española subió del 3,04% en que cerró el viernes, hasta el 3,21%. El interés exigido por los inversores para comprar bonos a diez años se incrementó del 5,24% hasta el 5,31%, mientras que la rentabilidad de su comparable alemán cayó del 2,19% hasta el 2,10%, lo que refleja que los inversores vuelven a comprar deuda pública germana para protegerse de los riesgos.
La situación de la deuda italiana ayer se deterioró menos que la de la deuda española. La prima de riesgo de los bonos del país trasalpino subió del 3,59% al 3,69%, mientras que la rentabilidad exigida por los inversores para invertir en deuda italiana se mantuvo en el 5,79%.
En el mercado de materias primas, descensos para el crudo: el barril de Brent, de referencia en Europa, bajó casi tres dólares, hasta los 112,57. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, también cotizaba a la baja, hasta los 86,31 dólares. La onza de oro, que marcó máximos de la jornada muy cerca de los 1.700 dólares, se cambiaba al cierre por 1.671 dólares. Pero, entre los metales, como siempre que hay malas noticias, el que más cayó fue el cobre.
El euro bajó medio punto porcentual con respecto al dólar, con lo que el tipo de cambio entre las dos monedas se situaba en 1,3777 unidades.