'Bebés Robados' toma pruebas de ADN a más de 60 personas
La asociación se reúne por primera vez en Cádiz para formar grupos de trabajo y asesorar a las familias afectadas
CÁDIZ. Actualizado: GuardarSon más de 300 los casos de personas que han denunciado la pérdida de un familiar entre los años 60 y 70 en Cádiz porque nada más nacer fueron robados. La asociación SOS Bebés Robados de Cádiz se constituyó para ayudar a esas madres que no cesan en el empeño de buscar al hijo que les arrebataron de sus brazos en la cama del hospital dándolo por muerto y a esos hombres y mujeres que desean hallar a su verdadera familia. Ayer, la asociación dio un paso más en la misión que persigue al facilitar a los afectados la realización de unas pruebas de ADN. Así, el perito judicial en pruebas de ADN, Jaume Buj, del laboratorio Neodiagnóstica, tomó muestras de saliva a más de 60 asociados en la sede de la peña flamenca La Perla de Cádiz. Los resultados irán a parar a un banco de ADN nacional ya existente. Esa base de datos facilitará la causa que une a tantas y tantas familias gaditanas.
Al encuentro acudieron unas 200 personas de varios puntos de la provincia y hasta de otras ciudades españolas. Allí, reunidos por primera vez en la capital, compartieron relatos y se organizaron en grupos de trabajo por localidades para comenzar a cotejar documentos y a dar pasos en firme. La presidenta de la asociación y el abogado de la misma, Chary Herrera y Martín de la Herrán respectivamente, asesoraron a los presentes sobre el procedimiento jurídico que deben seguir y convocaron una nueva manifestación contra el archivo de las ocho denuncias presentadas hasta el momento para el próximo 15 de noviembre. La concentración saldrá a las 10.30 horas de los Juzgados de Cádiz y pasará por el cementerio y el hospital Puerta del Mar.
Más de 300 relatos
María del Carmen Cortina es una mujer de 62 años que llegó ayer desde Barcelona para asistir al encuentro. Tuvo a su niña en el año 72 en Cádiz. Cuenta que a las dos horas de nacer su hija, las enfermeras del hospital le comunicaron que había muerto. Nunca dejaron que viera el cuerpo y eso le hace pensar que su hija puede continuar con vida. La historia de María del Carmen es similar a la de Carmen Torrejón, a la de Concepción Garván y a la de centenares de personas más de Benalup, Sanlúcar o Jerez. Carmen busca a su hermana melliza porque no le encaja que a su madre le mostraran el cuerpo de un bebé mucho más grande que ella, ya que habían sido sietemesinas. Su relato es aún más rocambolesco porque ni siquiera esa niña fue enterrada y no figura su acta de defunción en los archivos de la clínica Abreu, donde nacieron.
Concepción tuvo su primera hija con solo 18 años y a las pocas horas de verla se la quitaron. Siempre ha estado convencida de que la engañaron y comenzó su lucha sola. Ahora cuenta con el apoyo de toda su familia y de esta asociación para encontrarla.