Todos los aspirantes apoyan a Hollande frente a Aubry
El voto 'personal' de Montebourg refuerza al favorito de los sondeos para ganar mañana las primarias en la izquierda francesa
PARÍS. Actualizado: GuardarFrançois Hollande parte como favorito en los sondeos para imponerse mañana a Martine Aubry en la segunda vuelta de las primarias en la izquierda francesa de cara a las elecciones presidenciales de la próxima primavera. El principal aspirante a desalojar al conservador Nicolas Sarkozy del Elíseo ha concitado los apoyos de los cuatro candidatos socialistas eliminados el domingo en la primera ronda al anunciar ayer Arnaud Montebourg que también votará por él «a título exclusivamente personal».
«Mi opción corresponde ante todo a la ética de la responsabilidad: quiero hacer que gane la izquierda y batir a Nicolas Sarkozy», explicó el tercer hombre de las primarias para justificar su voto útil. «Más vale evitar la fragmentación, dar fuerza al que ha llegado en cabeza y apoyar al mejor aglutinador», argumentó antes de indicar que no tenía razones para «pensar que Martine esté más a la izquierda que François».
Tras el debate árido, tecnocrático e igualado mantenido el miércoles por la noche en televisión por los dos finalistas, Montebourg se reafirmó en la opinión de que «esas dos candidaturas son idénticas y deberían haberse puesto de acuerdo desde el principio». Pero, consciente de que muchos de sus partidarios proceden del ecologismo radical y la izquierda extraparlamentaria, puntualizó que no impartía consigna de voto por parecerle cuartelero e incompatible con el espíritu no partidista de las primarias.
El abanderado de la desglobalización prometió que el próximo lunes se pondrá al servicio del vencedor. Luego emprenderá una gira por Europa que iniciará en España para presentar su libro programático, que acaba de ser traducido al castellano, donde defiende sus ideas desglobalizadoras y neoproteccionistas.
El respaldo de Montebourg a François Hollande se inscribe en la misma lógica del brindado por Ségolène Royal de amplificar el avance del situado en cabeza y evitar el 'fantasma 51-49' de una victoria por estrecho margen que deslegitimara al ganador. Los apoyos inmediatos prestados por Manuel Valls y Jean-Michel Baylet tienen mayor coherencia ideológica por tratarse de personalidades de centro-izquierda próximas a un aspirante de marcado perfil socialdemócrata.
Frente a la lógica aritmética, Aubry se ve beneficiada por la dinámica favorable de la opinión. Un sondeo revelado ayer por el diario 'Le Figaro' la da perdedora por 47 a 53 pero ratifica que cada vez son mayores las intenciones de voto entre los simpatizantes de izquierda. También encontraron a la jefa del Partido Socialista más convincente (40 a 37) en el debate televisivo, que alcanzó una notable audiencia cercana a los seis millones de espectadores. La secretaria general del Partido Socialista confía en la movilización del electorado más a la izquierda y espera que no se produzcan trasvases mecánicos de votos en función de las preferencias de los jefes de corrientes, como ocurre en los congresos.