El Sanluqueño no llega tarde a un partido en el que fue mejor

El Sanluqueño está intratable, y prueba de ello fue el soberbio reparo que le dio al Ayamonte en la tarde de ayer, en un partido que comenzó media hora más tarde de lo que estaba estipulado, las 18.00 horas, debido a que no había banderines para los árbitros asistentes en las instalaciones del estadio El Palmar y la directiva tuvo que hacer gestiones para localizar otros banderines reglamentarios en diversas instalaciones de la ciudad para que el encuentro pudiera disputarse.

Anécdotas al margen, comenzó mandando el cuadro de Pepe Carrete desde el pitido inicial, puesto que a los ocho minutos ya ganaba gracias a un tanto de José.

Poco después, a la media hora de partido, Mota hacía el segundo para los verdiblancos y llevaba la tranquilidad al marcador, a pesar de que el conjunto ayamontino apenas se había acercado a las inmediaciones de Fran, que vivió muy tranquilo durante casi todo el encuentro.

Poco después, en el 34', Adrián Gallardo volvía a aparecer y anotaba su décimo tanto particular en lo que va de campeonato, zanjando un choque al que todavía le quedaba casi una hora para terminar.

Lógicamente, los verdiblancos bajaron un poco el pistón y eso lo aprovecharon los visitantes para meter algo de presión. Puntas acortó distancias en el 55', pero el Sanluqueño no se durmió y poco después Juanmi hizo el definitivo.