«Si las mujeres no nos comprendemos, ¿cómo van a hacerlo los hombres?
La autora presenta en Cádiz sus 'Violetas para Julia', la vertiginosa historia de tres generaciones de andaluzas
CÁDIZ. Actualizado: GuardarLa pamplonesa Julia Montejo convierte en oro todo lo que toca, o escribe. Periodista, guionista, directora y novelista, la autora no deja de escalar posiciones en la lista de los libros más vendidos con sus 'Violetas para Olivia'. La trama de 'Siete vidas', 'Gavilanes' o 'Motivos personales' llevan su sello, al igual que 'No Turning Back-Sin Retorno', una película que cosechó más de 20 premios internacionales. La española estará en breve en Hollywood con su guion 'Heart for auction', que ha comprado la Fox para llevarlo al cine. Mientras tanto, está volcada en la promoción de 'Violetas para Olivia', la historia de tres generaciones de mujeres andaluzas y las herencias invisibles que unas posaron sobre las otras. Hoy la escritora está en Cádiz para presentarla.
-¿Por qué una pamplonesa elige Andalucía como escenario de su novela?
-Mi madre es andaluza, de Huelva, y yo he pasado muchos verano aquí. Ahora los paso en Chipiona, así que conozco muy bien Andalucía. Además, yo necesitaba un lugar mágico para 'Violetas para Olivia', que es una historia de herencias invisibles, necesitaba un ambiente mágico, de noches largas y de gran aroma. Sitúo la escena en San Gabriel, un pueblo inventado que en realidad son muchos.
-Avisa de que 'Violetas para Olivia' no es solo una novela romántica, sino que en ella conviven varios géneros e, incluso, grandes dosis de filosofía.
-Lo de romántica es solo un envoltorio, pero esconde mucho más. Es una historia contemporánea en la que, en efecto, se fusionan muchos géneros. Trato de hacer una literatura con dos lecturas. La primera, entretenida, ágil, en la que se cuenta la historia de tres generaciones de mujeres y en la que la propia casa en la que se desarrolla va contando muchos de los secretos de la trama. La otra lectura está plagada de referencias literarias, filosóficas, sociales y antropológicas. Pero para mí lo más importante es entretener, conseguir que no suelten el libro para después trascender. Utilizo la novela como un escaparate para tratar temas de actualidad como las relaciones entre hombres y mujeres, la violencia machista o las herencias invisibles.
-¿Considera a Madeleine, la protagonista, como una heroína?
-Para mí se trata de un personaje auténtico, una mujer actual. Creo que todos llevamos dentro el héroe y el antihéroe, pero no creo en las heroínas, son mujeres pasadas de moda. No quiero caer en la trampa del maniqueísmo, creo que las personas somos mucho más complejas, tenemos muchas capas, lo demás sería estereotipar.
-Aboga por una novela sin género, sin embargo, cree que esta historia ayudará a los hombres a entender mejor a las mujeres...
-Creo que hoy día hay tantas mujeres como hombres en literatura, sin embargo, considero que los sentimientos de las mujeres no están muy desarrollados y menos a través de historias entretenidas. Las mujeres cargamos con esas herencias invisibles que ni siquiera nosotras entendemos y reaccionamos muchas veces de manera que no queremos. Si no nos comprendemos nosotras mismas, ¿cómo nos van a entender los hombres? Siempre digo que en el fondo las peores enemigas de las mujeres son las propias mujeres, que nunca hemos tenido espíritu gremial y no hemos sido capaces de aprender de los errores del pasado. No obstante, creo que ya es nuestra hora, que esta sociedad es idónea para permitir comprendernos mejor.
-Asegura que al ser madre se ha dado cuenta de lo difícil que es ser mujer...
-Es cierto. Nunca había sentido machismo hasta entonces porque había estudiado y trabajado en lo que me había dado la gana, pero cuando he sido madre me he dado cuenta de lo que tiene que cambiar el mundo para que se consiga una igualdad real. Aun así, éste es nuestro momento. Insisto, lo que han pasado las mujeres no ha sido por culpa de los hombres, eso me parece un punto de vista victimista que no corresponde.
-Como autora de guiones de cine y televisión, ¿cuál es la historia más difícil que ha escrito?
-Aquellos guiones en los que no creía pero tenía que escribirlos de todas formas. Eso me ha pasado muchas más veces en España que en EEUU.
-¿Y alguno que le hubiera encantado redactar?
-El de 'El paciente inglés'.
-Por eso prefiere la literatura, porque con ella guioniza y dirige, ¿no?
-Sí, como literata soy la única responsable, escribo lo que quiero. Un guion es más colaborativo y en cine, además, los proyectos son muy largos. La novela es parte de mí y ya está.
-Por cierto, ahora que ha firmado con la Fox para dirigir 'Heart for Auction', vuelva a España. ¿Goza el cine y la televisión española de buena salud?
-Creo que en España hay gente extraordinaria, muy creativa y trabajadora. Lo que ocurre es que hay un público muy limitado, no hay serie en la que no salga el niño y el anciano. Además, hay unas pocas productoras que lo hacen todo, así que al final todas las series acaban pareciéndose. Por otra parte, creo que han agotado a los guionistas, tratados muchas veces como oficinistas. Se fijan también demasiado de las producciones estadounidenses y al final son meras copias sin alma. Con todo, creo que el estado de salud de los guiones en España es de regular. Quizá deberíamos mirarnos más adentro, si no, ¿por qué 'Cuéntame' es una de las series de más calidad y exitosa?
-También es periodista, pero no ejerce. ¿Hay historias muy duras de contar?
-No ejerzo porque no tengo tiempo, pero me encanta. Es cierto que la profesión está muy acomodada, se contrasta poco. El periodismo de calle del que me enamoré apenas existe, por eso me he decantado por la ficción.
-Si volviera al tajo, ¿qué noticia o reportaje le gustaría hacer?
-Me gustaría escribir sobre la fuga de cerebros. Está claro que es porque no se invierte en I+D, pero me gustaría hacérselo llegar a la gente y plantear cómo se puede cambiar esa tendencia que para mí es una tragedia para este país.