Fundido a negro en Onda Jerez
La cerradura de las instalaciones amaneció sellada con yeso, y el ejecutivo esperó a poner la denuncia y mandar un notario para reabrirla La radiotelevisión suspende su emisión durante la mañana por un sabotaje
Actualizado:El conflicto que mantienen la plantilla de la radiotelevisión municipal Onda Jerez y el gobierno del PP en el Ayuntamiento por el concurso de acreedores y la amenaza de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) vivió ayer uno de sus más graves capítulos durante una mañana en la que las instalaciones del ente público amanecieron selladas lo que, unido a la lentitud en reabrir las puertas de la sede de la calle Caballeros, provocó que la señal de la cadena estuviera interrumpida durante toda la mañana.
Fue a las 8.00 horas cuando los trabajadores del turno de mañana de la radiotelevisión se encontraron con la desagradable sorpresa de que tenían que quedarse literalmente en la calle porque la cerradura de acceso a las oficinas (y a la imprenta municipal y los aparcamientos de los coches oficiales) estaba taponada con yeso.
Tras la incertidumbre inicial, y después de realizar las notificaciones pertinentes, los empleados esperaron en la calle hasta que las puertas se abrieran y pudieran acceder a su puesto de trabajo. Pero el tiempo comenzó a pasar, los programas grabados y en redifusión se acabaron, y llegó el momento del directo sin que la plantilla hubiera podido entrar en las instalaciones. Por eso, durante toda la mañana y hasta las 14.30 horas, que fue cuando un cerrajero abrió las puertas, la televisión estuvo emitiendo 'en negro' durante horas.
A este respecto, mientras los trabajadores demandaron en todo momento que se les facilitara el acceso a su puesto de trabajo, la alcaldesa de la ciudad, María José García-Pelayo, compareció ayer a media mañana para recalcar que hasta que no se realizara la oportuna denuncia ante la Policía Nacional no se iba a dar la orden de apertura de la radiotelevisión municipal.
De esta forma, y tal como se había decidido en junta de gobierno, solo una vez que la dirección de la empresa presentó la denuncia para que se investigaran los hechos y de que se levantara acta notarial de lo ocurrido se abrieron las puertas de las instalaciones del ente público.
En opinión de la regidora, hay que garantizar que «se vela por el interés de la empresa y el patrimonio y no mirar para otro lado». No en vano, lo ocurrido son unos hechos delictivos y se debe aclarar su autoría, «no podemos quedarnos callados ni permitir que haya silencio en relación con un acto como éste», añadió.
De otro lado, Raúl Ruiz-Berdejo, el presidente del comité de empresa, rechazó cualquier responsabilidad sindical en lo ocurrido y denunció que el Ayuntamiento tardara tanto en permitir que los empleados realizaran su trabajo, pese a que «a primera hora unos operarios de Infraestructuras se personaron en el lugar y finalmente se marcharon sin abrir la puerta».
Por este motivo, al filo de las 12.30 horas los empleados presentaron en el registro municipal un escrito en el que exigían que se desbloqueara el acceso al edificio y se garantizara su derecho a trabajar. «Somos un servicio público, esto va en contra del derecho a la información», apuntaban algunos de los que pasaron la mañana a las puertas de la televisión. Otros llegaron a calificar lo ocurrido de «cierre patronal» y hasta se habló de denunciar lo sucedido ante la Inspección de Trabajo.
Al margen del grave capítulo de ayer, que sin duda tensa las relaciones entre las dos partes, García-Pelayo volvió a insistir en que se ha dado un mes de plazo a la plantilla para que presente su propuesta par el modelo de gestión del ente público. Eso sí, bajo las premisas de «la pluralidad, la publicidad y que tenga equilibrio entre coste y calidad».
En ese punto, recordó que se han eliminado ya todas las contrataciones externas en Onda Jerez que tenía hecho el PSOE y llegó a afirmar que «se acabó la época de los amiguetes en este Ayuntamiento».