Una jornada del PP casi sin noticias de la banda

El corrosivo discurso de Aznar contra el Gobierno por la política antiterrorista desapareció ayer en la convención nacional del PP. Las alusiones fueron escasas y siempre dentro de la terminología actual de los populares. Dolores de Cospedal tenía escrito en su discurso una alusión crítica al lehendakari Patxi López por «coquetear con quien no debiera», en referencia a la izquierda abertzale. No la mencionó. Se limitó a decir que en la derrota de ETA tiene que haber «vencedores y vencidos» porque no puede haber «equidistancia entre víctimas y verdugos».

El coordinador electoral, José Antonio Bermúdez de Castro, también abordó el tema para exigir al Gobierno que esté «vigilante» en el cumplimiento de la ley con Amaiur, «la nueva marca de ETA», que se presenta a las elecciones porque es «el caballo de Troya» de los terroristas. La «oportunidad política», agregó, no exime del cumplimiento de la ley. Señaló asimismo que el objetivo de los demócratas «no es que ETA deje de matar, el objetivo es que deje de existir», porque aunque está en tregua «sigue viva».