Nene se mostró activo y anotó el gol del Racing a los siete minutos. :: ANTONIO VÁZQUEZ
CRÓNICA

Un punto ante la bestia negra

Los blanquinegros, ahora con el exracinguista Sanlúcar como técnico, habían ganado por el mismo resultado (0-1) en sus cuatro últimas visitasUn gol de Nene no fue suficiente para que el Racing derrotara al siempre correoso Mairena

EL PUERTO. Actualizado: Guardar
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Con un empate saldaron Racing y Mairena su enfrentamiento liguero en una tarde marcada por el persistente viento. Un pequeño pero nada desdeñable botín para los de El Puerto, pues el equipo alcoreño llegaba al José del Cuvillo como la auténtica bestia negra de los rojiblancos en los últimos años. Pero, curiosamente, en el duelo que más buscó el marco rival el club blanquinegro, el premio fue menor para ellos.

Los sevillanos aterrizaban en el coliseo de Valdelagrana con una buena base del plantel de las últimas campañas, el mismo que consiguió acceder por partida doble al 'play off' de ascenso a Segunda B. El Mairena se presentaba en tierras gaditanas en la zona noble de la tabla y con la vitola de ser el equipo menos goleado del Grupo X, ya que solo había encajado dos dianas hasta la fecha. Y la verdad es que no defraudó y plasmó sobre el tapete un juego mucho más ofensivo que el desplegado en la fructífera etapa de Eusebio Navarro. Ahora, con el exracinguista Manolo Sanlúcar desde el banquillo (su presencia en el José del Cuvillo pasó prácticamente desapercibida), el estilo fue más atrevido, pero la efectividad, para su desgracia, fue menor.

Por su parte, Galisteo realizó variaciones tácticas y puso en liza un once con dos carrileros de largo recorrido. En este caso, Kike y Ezequiel tenían la misión de ocuparse de las bandas rojiblancas, fortaleciendo el centro de la zaga con la presencia de Isaac junto a Juanma Reyes y Chiqui Paz. Y, todo sea dicho, no empezó mal la historia para el Racing. Nene, que cada vez va a más, se aprovechó de un rechace defensivo y cruzó el esférico ante Thorices en el séptimo minuto. Tal y como sucedió ante el San Roque hace dos semanas, los portuenses llegaban y pegaban. La alegría era desbordante en la parroquia local.

Sin embargo, los pupilos de Sanlúcar no se amilanaron y buscaron el tanto de la igualada. Y es que, si Suanes y Paquito (uno de los jugadores más destacados en el día de ayer) ya avisaron antes del primer gol rojiblanco, el propio Suanes, Mustafá y Gabri tuvieron la oportunidad de nivelar la balanza, pero las grandes intervenciones de Ismael y la falta de eficacia evitaron que así fuera.

Con el paso de los minutos, Álex Expósito probó fortuna con un disparo que despejó a córner Thorices, pero Suanes, que erró un claro mano a mano, y el propio Gabri, que no aprovechó una indecisión entre Isaac e Ismael, se encargaron de poner el corazón de los seguidores porteños en un puño.

Tom Corner, la nueva baza

Más tranquila fue la segunda mitad para el Racing, que pudo cerrar la contienda si Álex Expósito hubiese estado más rápido en un contragolpe que no llegó a buen puerto (70'). Eso sí, el Mairena, que no tuvo tanta presencia arriba como en la primera mitad, también contó con sus ocasiones para empatar e incluso reclamó un penalti por manos de Chiqui Paz. Hasta que llegó el gol de Uriel con la cabeza, tras aprovecharse de una prolongación en el interior del área, previo saque de banda (73').

De ahí a la conclusión, el Racing tiró de garra y pundonor para emular la heroica victoria ante el San Roque y dejar en el olvido el tropiezo de Ayamonte. Galisteo volvió a tirar de valentía y modificó el planteamiento en busca del triunfo. Buscar al debutante Tom Corner en el juego aéreo fue una de las últimas naves que intentó quemar un Portuense que volvió a dejarse la vida en el envite.