El 'tsunami' vendrá con la lluvia
El proyecto, creado tras el huracán Katrina, ha sido modificado para prever daños en las playas de Cádiz como los causados en el otoño de 2009. La UCA desarrolla un sistema que predice inundaciones costeras por temporal
CÁDIZ Actualizado: GuardarLa Universidad de Cádiz presentó ayer un innovador sistema que demuestra que la investigación en los centros universitarios no se limita a sesudos estudios con poca utilidad. En este caso, el fin práctico es precisamente uno de los aspectos más interesantes de MICORE, un sistema de alerta de grandes temporales costeros, que permitiría a la población prever grandes mareas e inundaciones cuando la tormenta azota el litoral. Cádiz, aunque no está en una zona de lluvias constantes, es claramente un punto de riesgo frente a estas tormentas extremas -las del invierno de 2009 fueron la mejor prueba-, ya que el 67% de la población vive en municipios costeros, donde con fuertes temporales pueden llegar a darse olas de hasta seis metros.
La investigación llevada a cabo por la UCA, a través del Grupo de Geomorfología Litoral de la Facultad de Ciencias del Mar, ha estudiado de qué manera afectarían unas grandes tormentas en dos playas gaditanas: por un lado, los arenales vírgenes de Camposoto, en San Fernando; y por otro, la playa urbana de la Victoria, en Cádiz capital, y han elaborado un mapa de inundaciones, que les permite estimar hasta donde llegaría el mar en caso de que se produzca un fuerte oleaje por tormentas. Con ello, se podría alertar a la población y a las administraciones en caso de que temporal pudiera causar daños. O trazar donde no es recomendable construir.
El nombre de MICORE es el acrónimo de «Impacto Morfológico y Riesgos Costeros, inducido por eventos de tormentas Extremas», en inglés. Aunque también es un guiño -significa «mi corazón» en italiano- al equipo de Italia (de la Universidad de Ferrara) que ha coordinado este proyecto, en el que participan al menos 16 centros de investigación de nueve países distintos (entre ellos, la UCA), subvencionado con fondos de la Unión Europea.
Un estudio de La Victoria
El sistema informático en el que se basa el proyecto -el XBeach- fue desarrollado por la Universidad de Delft (Holanda) a instancias de Estados Unidos después del devastador huracán Katrina. Ahora, la UCA lo ha aplicado a las playas de Cádiz y San Fernando. Para ello, desde que comenzó el proyecto en 2008, los investigadores han recorrido y analizado ambas playas, antes, durante y después de las grandes tormentas, para ver de qué manera se comportaba el sistema dunar tras soportar las mareas. Javier Benavente, profesor de la UCA que ha coordinado el proyecto en Cádiz, recordaba especialmente las históricas tormentas que azotaron la provincia en el otoño y el invierno de 2009, y que tantas inundaciones arrasaron buena parte de las playas gaditanas, fueron «a pesar de los daños», muy oportunas para elaborar el estudio sin tener que recurrir a modelos teóricos. De este modo, algunos investigadores del equipo, tuvieron que bajar a las playas de Cádiz incluso el día de Navidad, para medir cuánta arena se había perdido tras una de las tormentas más fuertes.
El programa informático cruza estos datos con las previsiones meteorológicas de la AEMET y las alertas de mareas de Autoridad Portuaria. El resultado se puede consultar ya en la web del proyecto, aunque se advierte de que es experimental y no una alerta oficial, y solo avisa del riesgo de inundación en la playa de Cortadura. En un futuro, el mismo grupo pretende afinar el proyecto para que también pueda advertir a los bañistas cuando las mareas son peligrosas.
En este sentido, el profesor encargado del proyecto en Cádiz, Javier Benavente, reinvindicaba ayer durante la presentación (en la Facultad de Ciencias), que «la Universidad puede desarrollar» el sistema, «pero no mantenerlo». «Habría que tener potentes servidores, gente de mantenimiento y un equipo de análisis morfológico, pero hay que poner voluntad y algo de dinero». Aunque ha habido negociaciones, todavía ninguna administración española ni andaluza se ha comprometido a llevar a cabo este sistema.