Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
Pedro marca de cabeza el segundo gol del partido. :: IVAN SEKRETAREV / AP
MÁS FÚTBOL

El Barça se pasea en Minsk

Messi alcanza a Kubala como segundo máximo goleador de la historia del club

CRISTIAN REINO
BARCELONA.Actualizado:

Cuando el equipo contrario sale al campo con el único propósito de que no le goleen y planta el autobús a cinco metros del área sólo hay una solución: paciencia. Esa fue la receta que preparó y desarrolló el Barça ante un temeroso Bate Borisov en Minsk, al que goleó con más facilidad de la esperada, teniendo en cuenta los antecedentes por tierras de la Unión Soviética. La borrachera de goles (0-5) pudo además haber sido mayor si los actuales campeones de Europa no hubieran levantado el pie del acelerador en la segunda parte. Después de una semana agitada en Can Barça, como consecuencia de que Guardiola diera su apoyo a Joan Laporta y a Sandro Rosell le cogiera un ataque de celos, existía un cierto temor entre el barcelonismo por si los malos rollos se contagiaban al equipo. Pero nada de eso. Menos aún si a Messi, el Kubala del siglo XXI, se le pone un récord a tiro.

Monólogo, por tanto, de los hombres de Pep Guardiola que, como botón de muestra, en el minuto 10 de juego ya registraban un 90% de posesión de balón. El Bate plantó a todos sus hombres, salvo a Mateja Kezman, al borde del área, con lo que los de Guardiola, que empezaron con cuatro defensas, se limitaron a tocar, abrir y esperar un desajuste en la poblada defensa para empezar a abrir la lata. El partido se puso cuesta abajo para los blaugrana mediada la primera parte, gracias a dos goles, casi iguales, que tuvieron su origen en el pico del área grande, en un caso en la izquierda y en el otro en el lado opuesto.

Alves oteó el horizonte, esperó el desmarque de Messi desde la segunda línea y le puso un balón en el segundo palo que metió en la red Volodko, muy presionado por el argentino. El 0-2 fue similar pero con Villa como pasador y Pedro como rematador. Dos goles en menos de dos minutos que cerraron el partido. Porque con 0-2 en el minuto 21 y con el Bate cerrado en su área, el Barcelona se dedicó a mantener el balón, tocar, abrir y buscar a Messi, que en Minsk, tenía una cita con la historia.

Tributo a Pereda

El día que el Barça rendía tributo a uno de sus mitos como lo fue Chus Pereda, fallecido el martes en Barcelona víctima de un cáncer, Messi se puso a la altura de otra leyenda azulgrana, el que para muchos (los viejos del lugar) es el mejor futbolista de la historia del club: Ladislao Kubala. Con solo 24 años, 'la Pulga', que debutó con el primer equipo en octubre de 2004, ha hecho ya 194 goles en competición oficial con el conjunto azulgrana y empata con el húngaro como el segundo máximo goleador de la historia del Barça, justo por detrás de César, que logró 234 en toda su carrera. Kubala tiene una estatua en el templo azulgrana y por su culpa el club tuvo que construir el Camp Nou. A buen seguro que si el de Rosario sigue con esta voracidad, el Barça deberá dedicarle más de una estatua y el coliseo de Les Corts se quedará pequeño.

Messi no tiene límites y aunque afirma por activa y por pasiva que eso de los récords no va con él, sus actuaciones en el campo le desmienten cada dos por tres. A corto plazo ya tiene dos retos: superar a Raúl como máximo goleador de la Champions (necesita 32 goles de aquí hasta que se retire) y figurar como el mejor artillero de la historia del Barça. Para esa empresa tiene que hacer 41 goles. El año pasado hizo 53, así que el récord no está nada lejos. Sólo a su alcance.