
La batalla que no puede caer en el olvido
La Guardia Salinera y las entidades napoleónicas vuelven a destacar con su representación del asedio a La Isla en el puente Zuazo. La recreación histórica sobre la lucha en el Portazgo se convierte en un pilar del 24 de septiembre
Actualizado: GuardarSin duda, San Fernando tiene los mimbres para convertir el Bicentenario en una de las fiestas más interesantes a nivel nacional. Otra cosa es que luego el cesto salga bien. Ayer, la Guardia Salinera y las asociaciones napoleónicas volvieron a demostrar que la recreación de la batalla del Portazgo debe ser uno de los pilares de la efeméride, al tratarse de una de las iniciativas más interesantes y elaboradas. Los participantes se metieron de forma intensa en el papel para volver a una época en la que el sonido ensordecedor de los cañones se convirtió en la rutina diaria.
Sonido que volvió a tomar el puente 201 años después con el de las escopetas y los gritos de «vivan Las Cortes, viva La Isla». Pero, en esta ocasión, difirió mucho con respecto al año anterior ya que despertó mucho menos interés entre los ciudadanos que no se agolparon en el puente Zuazo para presenciar una de las recreaciones con visos a convertirse en referencia nacional.
De nuevo, al igual que ocurriera el año pasado, se convirtió en el evento más espectacular del Bicentenario, que comienza a coger forma de cara a lo que será en los próximos años con una apuesta decidida por este tipo de iniciativas que transporta al ciudadano a lo que fue 1810. Aunque todavía quedan muchos flecos que cerrar, lo cierto es que se están dando pasos sólidos, claro que se trata de una batalla que no puede caer en el olvido. Hay que luchar por llamar la atención de las personas de fuera para atraer al turismo en esta fecha tan simbólica. En 2010 se lanzó el primer aviso y el próximo año cuando la atención se centra en Cádiz se tiene otra gran oportunidad para venderse al exterior.
La batalla del Portazgo que supuso el intento de las tropas napoleónicas de conquistar la ciudad de Cádiz, siendo repelidos estos intentos por la artillería y tropas acantonadas en la Isla de León, produciéndose a continuación el bloqueo de las posiciones españolas. La contundente respuesta de Diego de Alvear y Ponce de León obligó al ejército francés a replegarse a posiciones mas retiradas y cercanas a pinares (Pinar de los Franceses) y a la ciudad de Chiclana, iniciándose el denominado 'sitio de Cádiz', que se mantuvo 36 meses.