Últimos días de Buba en Jerez

Apenas le quedan unos días para despedirse de 25 años de vida en el Zoo de Jerez. La elefanta Buba se marcha la semana que viene a Hungría y muchos jerezanos la echarán de menos, no solo los más jóvenes. Está previsto que el animal regrese a su casa en una temporada pero no se ha fijado fecha de vuelta.

El equipo de conservación del zoo se encuentra ya realizando los trabajos necesarios previos al traslado del elefante, que se llevará a cabo en la primera semana del próximo mes de octubre. De esta manera, se pone en marcha una operación, que será también supervisada por técnicos especialistas del zoo húngaro y que el equipo conservador decidió el pasado mes de febrero pensando solo y exclusivamente en el bienestar del animal, que de esta manera podrá formar parte de un núcleo familiar y tener descendencia. El animal forma parte de un programa de reproducción de especies en peligro de extinción.

Con esta decisión Buba convivirá, a partir de ahora, con un grupo de elefantes, que hará posible que sea madre y conozca la vida en familia por lo que será muy importante para su desarrollo, ya que estos animales necesitan tener una vida en sociedad. En un primer momento se decidió trasladarlo la pasada primavera pero debido al calor se estimó más oportuno esperar la llegada del otoño. Cumplidos los objetivos reproductores, Buba podrá volver al zoo. «Estamos en crisis pero, estoy segura, que entre todos encontraremos la fórmula para que Buba vuelva y con familia. A eso dedicaremos gran parte de nuestros esfuerzos», dijo la delegada de Medio Ambiente, Felisa Rosado.

Despedida

Con motivo del viaje, el zoo ha organizado para mañana sábado un acto de despedida para la elefanta, dirigido especialmente a los más pequeños. Con la colaboración de Senda y el Grupo Scout, los participantes podrán realizar un mural dedicado a Buba, formular deseos que luego volarán en globos, recortar y colorear mil caretas de elefante y pintarse la cara con los rasgos del animal, entre otras actividades. La cita comenzará a las diez de la mañana y terminará a las 14.00 horas.

Pero la despedida no se limitará a ese día sino que los interesados pueden dejarle mensajes también en la página web del zoo: www.zoobotanicojerez.com.

Buba llegó a Jerez el 11 de marzo de 1988 procedente del Parque Nacional de Etosha, en Namibia. Este elefante africano, junto a otras 13 crías de su misma especie, fue salvado de morir en una caza selectiva. Cuando el Zoo de Jerez, dirigido entonces por José Miguel Cantos Ropero, tuvo noticias de la caza se puso en marcha para conseguir que un elefante recalara en el recinto por primera vez en su historia. Fueron muchas las empresas de la ciudad y los particulares que colaboraron en la iniciativa. Desde el zoo cuentan como anécdota que incluso una niña, llamada Helga Manzano, rompió su hucha para contribuir a la llegada del elefante. Una vez en el zoo fueron también los niños jerezanos los que le pusieron su famoso nombre a través de un concurso.