La séptima semana de paros en el transporte público comenzó ayer. :: ESTEBAN
Jerez

«No desconvocaremos la huelga hasta cobrar todo lo que nos deben»

La plantilla de los autobuses urbanos retoma sus protestas y anuncia un encierro hasta el viernes en el edificio de los sindicatos

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Los trabajadores de la concesionaria del transporte público en Jerez, Urbanos Amarillos, han iniciado su séptima semana de huelga endureciendo movilizaciones y reivindicaciones. Así, el presidente del comité, José María Romero, anunció ayer que tras la liberación de 1,5 millones de euros por parte del gobierno local para pagar a la empresa, ellos exigirán no solo el abono de las últimas «cinco nóminas», sino también que la compañía pague el dinero que les dejó a deber Cojetusa. Es condición 'sine qua non' para desconvocar las movilizaciones que vienen manteniendo desde hace más de un mes y medio.

«Se ha hecho lo que todo el mundo decía que no se hiciera, es un nuevo parche», subraya Romero en referencia al acuerdo de la pasada junta de gobierno local. Partiendo de la base de que se ingresará a la empresa el dinero del canon, «Urbanos Amarillos tendrá que pagarlo todo, por ejemplo el precio de los autobuses y las nóminas que a nosotros nos debía Cojetusa».

«Estamos -destaca- ya en la séptima semana de huelga y si se hubiera hecho así, que es un parche, el problema se habría resuelto el primer día». Por tanto, para desconvocar la huelga reclaman ya no solo el pago de los salarios desde mayo, sino también la de octubre, la extra y la liquidación de todo el año que dejó pendiente la anterior concesionaria del servicio.

En cuanto al nuevo calendario de movilizaciones aprobado por los trabajadores ayer en asamblea, han decidido que se concentrarán de martes a viernes frente a las puertas del Ayuntamiento, desde las 7.30 hasta las 20.30 horas, y dormirán en el edificio de los sindicatos, que está situado a escasos metros.

Los trabajadores han acordado realizar nuevas protestas después de iniciar la que ya es su séptima semana de huelga «sin saber nada». Comentan en este sentido que desconocen cuándo van a percibir los salarios pendientes.

Servicios mínimos

Asimismo, el comité de empresa denuncia el incumplimiento de los servicios mínimos -un autobús por cada una de las 16 líneas- y advierte de que el «mal estado» de los vehículos no garantiza que puedan cumplir lo contemplado en la ley para estos casos.

Tras el paréntesis del fin de semana, los trabajadores reanudaron ayer los paros a las 6.00 horas, concentrándose un día más a las puertas de El Portal, donde se encuentran los garajes de los autobuses urbanos jerezanos.

Desde la asociación de comerciantes Asunico su presidente, Manuel García, pidió ayer un margen de confianza al nuevo gobierno ante el «callejón sin salida» en que se han convertido los autobuses. «La ciudad es una vez más rehén de las protestas y espero que esta semana les den carpetazo», confió.