Dos niñas de 11 y 13 años denuncian a un hombre por supuestos abusos en Olvera
La Guardia Civil investiga si el detenido, panadero de profesión, ha agredido a más chicas que por miedo no han hablado
CÁDIZ.Actualizado:Un pequeño empresario de Olvera ha sido detenido la semana pasada por la Guardia Civil, acusado de haber abusado supuestamente de dos niñas menores de edad, las cuales aseguran que les practicó tocamientos sin su consentimiento.
La investigación iniciada por los agentes no se detiene en el relato de estas dos menores y en estos momentos trata de esclarecer si pudo haber más víctimas que no han querido relatar lo ocurrido. Fue precisamente una conversación entre las dos niñas la que les a no guardar silencio y denunciar al presunto abusador.
La más pequeña de las dos, de once años, acudió el jueves de la semana pasada a una frutería para realizar un encargo. Cuando se encontraba en el interior del comercio, según aparece reflejado en la denuncia, entró el detenido José S. C. para entregar una partida de pan. Siguiendo con el relato que hace la chica, la dependienta de la frutería se ausentó unos instantes para meter la mercancía en el almacén y fue en ese instante cuando José S. C. se acercó a ella y le tocó los pechos por debajo de la ropa.
La niña, asustada, se marchó del comercio y le contó a una amiga de 13 años lo que le había ocurrido. La sorpresa de la víctima fue que la otra chica le reconoció que también había sufrido tocamientos por parte del mismo hombre. Ambas decidieron acudir a sus familias y de ahí al cuartel de la Guardia Civil.
Las mismas fuentes consultadas confirmaron a este medio que los agentes trabajan sobre la hipótesis de que el supuesto abusador pudiera haber cometido más abusos.
Por otro lado, otro individuo fue arrestado en Los Barrios por haber exhibido sus genitales a una menor y a su madre. Los hechos sucedieron también el jueves, cuando el detenido, que se encontraba en la urbanización de Guadacorte, le mostró sus genitales y realizó gestos obscenos delante de una menor que acababa de salir de su casa. La niña entró de nuevo en su vivienda para avisar a su madre, que vivió la misma escena cuando fue a recriminarle al detenido su actitud. Éste huyo en su vehículo, pero gracias a la matrícula pudo ser localizado y arrestado.