Un Estado palestino
Actualizado:Los palestinos pedirán finalmente para su patria la condición de miembro de pleno derecho de la ONU la próxima semana en el Consejo de Seguridad, lo que les garantiza el anunciado veto norteamericano. El Gobierno Obama ha hecho lo imposible por evitar una situación tan incómoda, pero Mahmud Abbas ha optado por ese arduo camino y el del enfrentamiento con Washington. El resto es sabido: tras el veto se elevará la petición a la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde nadie puede ejercerlo y allí hay holgura para obtener la condición estatal, rebajada a la de 'Estado-observador', pero miembro al fin, como la Santa Sede por ejemplo, con capacidad jurídica suficiente para denunciar la ocupación de parte de su territorio (ahora en disputa) por otro Estado. Israel fue creado por una resolución de la Asamblea General y es curioso que ahora objete tal mecanismo y, como Washington, remita a la negociación de las partes. Ese argumento es artificial y para salir del paso. Desde que en mayo el presidente Obama dijo que las fronteras de 1967 son la base de toda negociación se unió al casi unánime consenso internacional, pero el candidato Obama no puede decirlo ahora: su veto es hoy, desgraciadamente, una necesidad electoral.