Es noticia:
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizCádiz
PAN Y CIRCO

TRISTE CENTENARIO

MANOLO CAMACHO
Actualizado:

El 31 de octubre de 2008 iniciábamos en Punto Radio una sección donde de la mano de los oyentes íbamos dando ideas para el centenario. Por un centenario digno, era la coletilla de la sección, algo que a todas luces que no se ha conseguido. Ese dossier de ideas se le entregó en mano al club en un programa especial que llevamos a cabo desde el mismo estadio Carranza antes de terminar la temporada 09/10, pero viendo el resultado final, creo que deberíamos haberle entregado dos o tres dossiers. Y no es que todas las ideas aportadas fueran buenas, era simplemente una tormenta de ideas, lo que quiere decir, que podía haber algunas descabelladas pero que podían dar pie, tamizándolas un poco, a una brillante idea para la efeméride cadista. Pues nada, nuestro centenario ha finalizado, y ha pasado con más pena que gloria. Así es por desgracia. Entiendo las dificultades económicas debido a la crisis que azota al mundo agravado por militar en Segunda B, pero no es de recibo los escasos y poco lucidos actos llevados a cabo. Ante la falta de recursos económicos, la imaginación al poder.

Jugadores de temporadas pasadas que estaban dispuestos a venir, incluso pagándoselo ellos, resulta que no fueron avisados para tan magno acontecimiento. De la camiseta del centenario, que fue elegida por los mismos aficionados entre varias propuestas, nunca más se supo. Si no hay dinero, al menos se podría haber hecho una edición limitadísima (es decir 16 indumentarias) para que al menos el equipo la hubiera lucido en algún partido oficial. Y podría seguir con más cosas. El centenario ha respirado (con respiración asistida, eso sí) gracias a los actos realizados por peñas, colegios, ONCE, Correos o ayuntamientos de la provincia, pero poco se ha aportado desde el propio club. Una pena, la verdad. La lectura positiva de esto, es que les servirá de experiencia y el bicentenario cadista saldrá mucho mejor. ¿O no? Posiblemente salga igual, pero al menos no lo sufriremos porque ya no estaremos aquí. Y punto.