La policía inglesa investiga una red de esclavos
LONDRES. Actualizado: GuardarCuatro gitanos de origen irlandés fueron interrogados ayer en relación con una supuesta red de esclavitud laboral que estaría montada en el campamento de caravanas de Greenacre, en el condado inglés de Herdfordshire. La madrugada del domingo, unos docientos agentes de la Policía entraron en el asentamiento y «liberaron» a 24 individuos que vivían en alarmantes condiciones de «suciedad y confinamiento», según el inspector jefe Sean O'Neil. Una mujer embarada, detenida durante la redada, fue ayer puesta en libertad condicional.
La Policía sospecha que los arrestados obligaban a trabajar fuera del campamento gitano al grupo de varones que habrían «reclutado» en oficinas del paro o en centros de acogida de los 'sin techo'.
«Les dicen que ganarán unos 90 euros al día y les garantizan comida y alojamiento. Pero cuando llegan aquí, les cortan el pelo y los meten en casetas de perros y de caballos o en viejas caravanas. Les obligan a trabajar sin remuneración y les dan muy pequeñas cantidades de comida», denunció el inspector.
De acuerdo con O'Neil, algunos de los liberados llevaban 15 años retenidos y forzados a trabajar arreglando casas privadas o asfaltando carreteras. Pero su teoría comenzó a resquebrajarse ayer por la tarde cuando nueve de los 24 individuos indicaron su negativa a colaborar con la investigación. «Los arrestos son pura basura. La Policía odia a los nómadas. Los hombres están aquí porque quieren y reciben su paga», dijo uno al diario 'The Guardian'. La mayoría son británicos y otros proceden de Polonia, Letonia y Lituania.