La banca británica deberá separar sus divisiones minorista y de inversión
LONDRES. Actualizado: GuardarLas entidades financieras británicas tendrán que separar sus actividades de banca comercial de las de inversión y aumentar la proporción que guardan de capital, según las recomendaciones de una comisión que estudió las reformas para dar estabilidad al sector y evitar que los contribuyentes paguen nuevos rescates.
El informe de la Comisión Independiente sobre la Banca, creada por el Gobierno de coalición conservador-liberal, confirma su recomendación más disputada, la obligación de los bancos de separar -con sus propios consejos de administración y diferentes normas de provisión de capital-, la banca al detalle de depósitos y préstamos y la de inversión, que abarca desde el asesoramiento en fusiones al gran comercio en monedas o en contratos derivados de seguros.
El argumento para exigir esta división se basa en que la banca comercial no puede caer -el Gobierno ya movilizó cerca de un billón de libras y quedó como propietario del 84% del Royal Bank of Scotland y del 41% de Lloyds para sostener las operaciones bancarias, tras el desplome de 2008- pero la de inversión, de enorme talla en el centro financiero británico, representa menos riesgo para la estabilidad del sistema.