Egipto-Israel: el desastre
Actualizado:La difícil y artificiosa relación bilateral entre Egipto e Israel acaba de sufrir otro grave incidente: manifestantes egipcios reunidos para otra cosa (pedir ciertos cambios políticos al régimen militar interino surgido tras la caída de Hosni Mubarak) asaltaron la Embajada de Israel en El Cairo y el personal diplomático, embajador incluido, tuvo que ser rescatado por soldados egipcios. El desbordamiento, que no parecía planificado, mostró una imprevisión del Gobierno que indicó a su jefe, Essam Sharif, la conveniencia de ofrecer su dimisión al Consejo Militar Supremo, puesto en un grave aprieto sin merecerlo. El proceso revolucionario en Egipto propicia que la conocida hostilidad popular a Israel se exprese ahora con una naturalidad y vigor imposibles bajo Mubarak. Eso es legítimo e inevitable, pero en tanto haya relaciones diplomáticas el Gobierno tiene la inexcusable obligación legal y moral de proteger la embajada y a su personal. Lo sucedido es muy lamentable y no puede ser excusado por la tensión ambiental propia del cambio de régimen.